Lo Mejor del Mes: Del 1 de julio al 31 de agosto
Tras un verano de parón, regresamos en la sección Lo Mejor del Mes, y lo hacemos por partida doble, destacando las mejores series para Daniel Bernat, Iván Cuerva y María Lage en estos dos meses de julio y agosto. Ante la falta de series que seguimos, en comparación con la temporada regular, decidimos extender el artículo para así poder redactar un post con más garantías, ya que así nos permitiría ver si el paso de las semanas mermaba alguna de las series que queríamos introducir en julio. Y lo cierto es que no lo ha hecho en absoluto. Tyrant, la serie que destaca Iván, se ha consagrado como una de las mejores de este verano, pese al poco seguimiento; Kingdom, serie destacada por Daniel, terminó su temporada la primera semana de agosto, pero dejó un gran nivel tanto en julio como en junio, por lo que ha considerado que merecía la pena estar aquí; y BrainDead, la serie de la que os hablará María, ha pasado a ser por méritos propios uno de los estrenos del verano.
Serie de Daniel: Kingdom
Hay muchas series que pasan desapercibidas por el gran público, debido a la falta de publicidad que tienen las mismas fuera del país de emisión (en este caso USA). Una de ellas es Kingdom, que en España tiene una repercusión mínima, por no decir casi inexistente, y sin embargo, la gente no sabe lo que se está perdiendo.
Esta segunda mitad de temporada ha supuesto el ascenso y caída de Jay Kulina, y la caída y ascenso de Ryan Wheeler, todo en diez episodios intensos que poco margen han dejado para la tranquilidad, porque si no eran las peleas masculinas, teníamos las femeninas con el personaje de Natalie Martínez; o bien las mierdas internas varias de Alvey, que arrastra desde comienzo de serie; o los problemas de Nate, que finalmente ha salido, o al menos en parte, del armario. Kingdom no es solo de peleas de MMA, sino de los problemas y dificultades de una familia, como muchas otras… Bueno, realmente no sé hasta qué punto una familia puede tener tantos miembros tan desestructurados mental y psicológicamente hablando.
Jay es quizá el mejor personaje de la serie, y el más destrozado emocionalmente hablando, y el más autodestructivo. Recién conseguido el éxito, se consume en una espiral de drogas, sexo y alcohol con una yonki de manual, y se hunde en la más absoluta de las miserias, para acabar perdiendo el título que tanto había ansiado, y que había conseguido. Lo cierto es que sufres viendo lo que pasa, y eso es mérito directo de Jonathan Tucker, porque logra que con su actuación empatices con el personaje, y es difícil, viendo el perfil del mismo. Lo mismo pasa con Alvey, aunque con él quizá no empaticé tanto, pero sí que logras conectar con él, aunque no sea siempre. Otro mérito de Kingdom es que, bajo mi punto de vista, es complicado no conectar con los personajes principales, por unas cosas o por otras. Sin un elenco de renombre, logra engancharte a una historia sobre el mundo del MMA, pero también a las dificultades y vivencias de una familia, y lo hace de maravilla. Este verano ha sido para mí uno de las mejores series emitidas, y por desgracia, no ha tenido la repercusión que se merecía.
Antes de acabar, me gustaría destacar la actuación de Kiele Sánchez, que interpreta a Lisa. Y lo hago porque lo que le sucede a su personaje, le pasó también en la vida real. Estaba embarazada, esperando un hijo con su marido, el también actor Zach Gilford (Matt Saracen en Friday Night Lights), y por eso abandonó la ficción durante unos episodios. Por desgracia, perdió al bebé que estaba esperando, justo cuando les quedaba apenas un mes para recibirle. Iba a llamarse Winter. La actriz no obstante, volvió a la serie, y en ésta, le pasaba lo mismo a su personaje, perdiendo el bebé. Lo destaco, porque no me puedo ni imaginar lo que sintió la actriz en la vuelta al trabajo, viendo como su personaje le sucedía lo mismo. Un diez para Kiele, porque lo hace genial y no tuvo que ser fácil, dadas las circunstancias.
Serie de María: Braindead
Braindead se estrenó el trece de junio y empecé a verla sólo y exclusivamente porque tras ella está el matrimonio King, los responsables de la recién terminada The Good Wife. Y … para empezar, Braindead no tiene mucho que ver con The Good Wife, pero es una seriaza igual de maravillosa.
Durante los meses de julio y agosto, Braindead ha sido de lo mejor que hemos tenido la suerte de ver en nuestras pantallas. De hecho, no es una serie de verano… es una serie top que se merece ser tratada como una estrella de la CBS.
Los episodios que hemos visto a lo largo de estos dos meses de verano son los siguientes: Wake Up Grassroots: The Nine Virtues of Participatory Democracy, and How We Can Keep America Great b; Back to Work: A Behind-the-Scenes Look at Congress and How It Gets Things Done (and Often Doesn’t); Past as Prologue: Notes Toward a Post-Reagan Theory of Party Alliance, Tribalist, and Loyalty; The Power of Euphemism: How Torture Became a Matter of Debate in American Politics (uno de los mejores de la serie, en mi opinión); The Path to War (1): The Gathering Political Storm; Taking on Water: How Leaks in D.C. are Discovered and Patched y para finalizar The Path to War (2): The Impact of Propaganda on Congressional War Votes. Creo que una serie con unos episodios así, merece ser vista sólo para leer los títulos de cada episodio. Y si eso no os parece suficiente, siempre tendréis el mejor Previously de la historia de la televisión.
Dejando de lado el análisis de la serie en si, que haré con mayor detenimiento una vez finalice la temporada, este verano nos ha dado episodios de Gustav y su impresionante inteligencia corriendo por Washington D. C. junto a Rochelle y su nada desdeñable inteligencia, aunque menos impresionante. Hemos visto también la impagable escena de sexo confuso entre los personajes que tienen… o no tienen… o sí, la típica tensión sexual no resulta. Porque hay trama amorosa y es genial, es dulce y divertida. Y es la mejor serie del verano porque hay muchísimo suspense y unos cliffhangers de infarto que jugaron con la idea de que la protagonista pudiera ser víctima de los insectos villanos come cerebros… y no lo fue, porque Gustav y Rochelle propiciaron una escena erótico confusa divertidísima.
La serie hace de la sátira uno de sus pilares, pero durante estos meses, la forma en la que a base de humor nos han ido criticando la forma en la que hacer política significa apoyar guerras ilegales contra un enemigo que no es tal o justificar la tortura a base de eufemismos es sencillamente genial.
Serie de Iván: Tyrant
Este “especial” vuelta de vacaciones de la sección sirve muy bien para que podamos expresar que ha sido lo que más hemos disfrutado en los meses de Julio y Agosto, en los que el mundo seriéfilo está bastante parado. Esta ocasión especial también me sirve para reivindicar el papel de “Tyrant” (de la que os hablé hace poco en las recomendaciones veraniegas) como una de las mejores series en emisión en estas fechas.
Viene de fábula que englobemos 2 meses en esta entrada, ya que puedo hablar perfectamente del global de la temporada con la excepción de muy pocos episodios. Este año, es cierto que hemos tenido una trama mucho más tranquila, pero esto no ha hecho que la serie baje el nivel, aunque más pausada que de costumbre todo el tema de las elecciones nos ha descubierto una “Tyrant” mucho más intimista a lo acostumbrado.
Me atrevería a decir que el arco argumental de las elecciones terminó siendo secundario, una escusa para que el resto de los personajes tengan cosas que hacer mientras se cocinaba el auténtico eje de esta tercera temporada: el descenso a los infiernos de Bassam. El politiquéo y el ascenso Ihab dentro del Estado Islámico han sido el caldo de cultivo idóneo para que el que otrora fuera héroe de la libertad y la democracia en Abbudin, se haya terminado convirtiendo en su hermano Jamal tras el asesinato de su hija y la presión propia de ser el presidente de una Abbudin al borde de la guerra.
Fuera de Bassam y sus demonios, quiero destacar el gran trabajo de Moran Atias este año. Leila Al-Fayeed nunca había sido de mj agrado, pero la actriz ha conseguido aprovechar bastante bien el mayor protagonismo de su personaje en esta temporada.
La serie por lo demás se ha mantenido fiel a su estilo, aunque sus tramas han sido algo más lentas, cada capítulo ha tenido un ritmo bastante alto y los giros de guión clásicos de “Tyrant” han seguido ocurriendo.
Tras la noticia de su cancelación hace 2 días y a falta de un episodio por ver, en el que crucemos los dedos para que dejen cerrada la historia, podemos decir que “Tyrant” ha vuelto a ser un oasis de paz y calidad en un verano con muchas decepciones.