Otro episodio que sigue la tónica general, pero quizás éste ha sido especialmente divertido, con algunas escenas muy graciosas y pasando de forma muy superficial por todo lo que tuviera un toque dramático. La serie sigue en su línea y la temporada se mantiene en muy buen nivel pese a que la trama se haya alejado enormemente de los derroteros comunes en Legends of Tomorrow.

Es impresionante como intentan no influir en el pasado y no dejan de copar las portadas de los periódicos, son disparados por señores de puestos callejeros y lo único que hacen es liarla muchísimo en universidades y psiquiátricos o provocar un apagón en toda una ciudad. Nuestros chicos no se toman muy en serio eso de pasar desapercibidos aunque supongo que el momento álgido ha sido cuando se han cargado a Edison justo después de que fuera destruido el robot que fingía ser Hoover. Para añadir más locura al asunto Edison ha sido sustituido por un robot al igual que Hoover tras la destrucción del robot anterior.

Me gusta como siguen manteniendo la dinámica de bromas entre Gary y Nate. Al final el bueno de Gary ha sabido ganarse su puesto en el equipo y mantiene un papel muy sólido en todas las relaciones entre los personajes. Creo que me interesa más como reacciona Gary a la relación entre Nate y Zari que la propia relación entre estos.

La trama de la piedra de la suerte ha estado entretenida y me ha gustado cómo seguimos ahondando en la relación entre Astra y Spooner; la relación de Nat y Zari no está en su mejor momento y eso está bien porque mantiene a Gary entretenido; las cocapitanas casadas siguen igual de estupendas que de costumbre, pese a que la temeridad de Sara casi hace desaparecer a su esposa del espacio- tiempo. Los hermanos Tarazi continúan siendo igual de inteligentes y poco a poco nos van introduciendo un interés romántico de Berhad por Astra, algo que se toca de forma sutil y por el momento no estorba.

Me ha resultado muy refrescante la forma en la que han manejado que el rostro del Dr Davies les resulta familiar a todos los miembros del equipo. Nos han querido transmitir que aunque los espectadores veamos al mismo actor realmente ellos sólo ven un rostro familiar y no necesariamente la cara de John Constantine. Gary lo compara con Mick, Sara le ve algo que le recuerda a Stein de joven y Zari nota cierto parecido con Ray.

Por por fin están todos reunidos. Ha sido divertido tenerlos en distintos escenarios pero es muy satisfactorio que por fin vayan a vivir juntos las aventuras que restan de la temporada. Ya era hora de escapar de 1925 y empezar el nuevo arco argumental …. en no sabemos dónde, ni sabemos cuándo.