Pilotos: Star Trek Discovery
Tener a Bryan Fuller detrás ya de por sí genera mucho hype; da igual el proyecto, pese a que American Gods me decepcionó un poco, negar que este hombre es un crack merecería que me flagelara por lo menos un poquito. Si tener detrás a semejante bestia es poco, cuando decimos que es el resurgir en televisión de una de las series míticas de la ciencia-ficción ya empieza a echar humo nuestro medidor de hype. Star Trek vuelve a la pequeña tras 12 años y varias películas a sus espaldas gracias al servicio online de la CBS (aunque en España y el resto del mundo menos Estados Unidos podremos seguirla a ritmo de emisión en Netflix) y estas han sido mis impresiones a los dos primeros episodios de esta nueva entrega de la longeva franquicia.
Desde el principio voy a ser claro: estos dos primeros episodios me han recordado mucho tanto al comienzo de la reimaginación de Battlestar Galactica como al del anime Attack on Titan. Al igual que ambas series, Star Trek: Discovery no se anda con tonterías y nos muestra todas sus cartas desde el principio, que en muchas otras ficciones todo lo ocurrido en estos capítulos iniciales bien podrían tardar media temporada o no haberlo aprovechado y quitárselo de encima en sus primeros minutos. Un primer episodio para colocar al espectador en situación (no presentar el universo ni nada por el estilo, simplemente colocar las fichas en su punto de partida) y un segundo para desencadenar un apocalipsis ¿Entendéis ahora los parecidos?
La forma de tratar al espectador la considero muy acertada, gracias a las últimas películas (que ya han confirmado que no van a estar relacionadas con la serie) o bien por simple cultura popular, no hace falta ser un experto de Star Trek para saber quienes son la Flota estelar o los Klingon y personalmente considero todo un punto a favor que hayan ido a lo seguro en lugar de intentar hacer experimentos, sobre todo porque gracias a esto la serie se puede permitir semejante ritmo en sus primeros compases. Recalco que no hace falta ser un entendido de todo el universo Trekkie, yo mismo no lo soy y en ningún momento me he sentido perdido.
La presentación de personajes por lo menos ha sido correcta, centrándose sólo en cuatro de ellos y con algún secundario que puede ganar peso en las próximas semanas. Algo acelerado todo y con personalidades algo simples al principio, pero a ver cómo evolucionan. De momento lo que más me ha convencido es la forma que han tenido de introducir a los Klingon y su cultura.
Técnicamente me ha dejado sin palabras, si bien en alguna escena en el espacio el croma canta, en el resto parece estar muy por encima de muchas otras series del género. Sigue el camino en este apartado de The Good Fight, que también aparentaba un aspecto más cercano a una producción de cable que al de una network. La CBS está apostando muy fuerte con estas dos ficciones para su plataforma online.
Con lo mostrado aquí, da la sensación que salvo en contadas ocasiones la serie se va a alejar bastante de los autoconclusivos y que va a optar por un estilo mucho más seriado. Tengo que admitir que esto me daba bastante miedo, ya que considero que una producción de este calibre tiene armas más que suficientes para evitar esquemas repetitivos que podemos ver en decenas de producciones. Espero que estas sensaciones no se tuerzan a las primeras de cambio.
Por el momento, lo que he visto en estos primeros episodios de Star Trek: Discovery me convence bastante. He quedado con bastantes ganas de saber cómo continúa la historia planteada en este piloto.