Review Andor: Nobody’s Listening !
Hoy la verdad es que encaro esta review con los ánimos un poco tocados por un par de causas, y pensaba que con el episodio de Andor correspondiente me vendría más abajo todavía. Pero no sé si es que yo de la serie ya espero más bien poco, y con algo que me ofrezca que mínimamente me guste me sirve, pero a mí esta semana me ha gustado lo que he visto, y eso es novedad.
Eso sí, no puedo olvidarme de lo que no me gusta, así que voy a empezar por lo que sigue sin convencerme: el personaje de Syril. De no hacer nada en semanas, ha pasado ahora a ser un acosador malrollero. Sinceramente, en cuanto a evolución de este señor en la trama, creo que es uno de los puntos más flojos de una serie que no me está maravillando precisamente. No sé qué pretenden hacer con él de aquí a que acabe la temporada, pero no me ha aportado nada en nueve episodios, habiendo superado ya tres cuartas partes de la misma.
Esto no es per se algo que me disguste del capítulo, pero lo traigo a colación porque creo haberlo leído en Twitter y está relacionado con un personaje que hoy ha tenido una mínima relevancia. Un rumor que apunta que Adria Arjona, actriz que interpreta a Bix, habría firmado un contrato múltiple con Disney, que causaría que la viéramos en más proyectos derivados de la franquicia, spin offs directos de Andor o no. No me gusta porque, primero, estoy harto de que no salgan de la franja de tiempo entre el Episodio III y el IV; y dos, porque Bix, como Syril, tras nueve episodios, me dice entre nada y menos. Si tiene que sostener por sí sola un spin off, me parece un ejercicio fútil desde la base. Si ya la idea de un proyecto propio para Cassian Andor me echaba para atrás, y el tiempo me ha confirmado mis temores, uno acerca de un personaje, por ahora, absolutamente irrelevante, me repele directamente.
De quien sí vería uno, o, mejor dicho, sí que me parece un acierto de la serie, es de Dedra. Es de las pocas cosas que me han ido gustando más y más conforme han avanzado las semanas, y tengo que decir que si querían que me alineara con los rebeldes, sinceramente, no lo han conseguido; con este personaje voy a muerte, porque su causa sabemos que está totalmente perdida, pero al menos intenta hacer algo con su vida, es una profesional, y sabe lo que quiere, cosa que es más que lo que denotan la mayor parte del elenco de personajes, incluido su protagonista, que han logrado que se me caiga desde que tiene su serie propia.
La trama de Mon Mothma sigue en un punto intermedio entre la nada más absoluta y el amago de querer empezar a que pasen cosas. Y la sitúo ahí y no hacia el extremo de la pérdida de tiempo absoluta porque han enlazado tramas, gracias a que nos presentan que la prima de la política no es otra que Vel, una de las rebeldes que participó con Cassian en la operación de hace unas semanas. Parece una tontería, pero quizá este simple hecho de interconectar personajes era justo lo que necesitaba para que la parte de historia de la senadora comience a despertar de un letargo cansino.
Otra cosa que parece que se anima es lo del personaje principal, que acabó en esa prisión/fábrica imperial por, básicamente, ser muy poco espabilado, y no porque formara parte de ningún plan mayor, lo cual le ha restado puntos a la consideración en que yo le tenía. No obstante, como digo, tiene pinta de que ya ha dejado el modo pasivo y se empieza a poner manos a la obra, en pos de la meta más realista, por así decirlo: huir. Tras lo ocurrido esta semana, espero que en la próxima ya tengamos más acción en esta trama.
Pero todas mis reviews giran en torno al mismo principio: “a ver si en el siguiente episodio pasa algo”. Andor puede que tenga buenas ideas, que hable de temas poco habituales en esta franquicia y lo haga sin tapujos, mostrándote la crudeza de la época en la que se sitúa la trama de la serie, pero esto podría haberse ejecutado muchísimo mejor, con menos episodios y que hubieran tenido un ritmo mayor; se puede ser una serie lenta y contar cosas, mientras que esta se recrea en transmitir que va a un ritmo diferente de otras producciones de la franquicia, no sé si en un intento de esforzarse por ser distinta; ya sé que lo es, no hace falta reducir el ritmo hasta el punto de ver crecer la hierba para contar esta trama. Le sobran capítulos, y lo que podría haber sido un producto interesante de Star Wars para mí se está quedando en un intento fallido y artificial de algo que, para mí, no debería haberse extendido tanto, ni en episodios ni en minutos.