Mythic Quest (3ª Temporada): Cambio de juego
Sí, esto es un artículo de toda la temporada de Mythic Quest, el año pasado decidimos dedicarle a la serie reviews semanales a cada episodio y en esta ocasión, al haber tenido acceso anticipado a los episodios de toda la tercera temporada hemos optado por que lo mejor era dedicarle un artículo hablando de lo que en este caso me ha parecido esta nueva entrega de la serie. Informaros que no habrá spoilers de esta nueva temporada en el artículo, ya que como viene a ser costumbre a excepción de los dos episodios con los que abre hoy la temporada el resto de la misma se emitirá de forma semanal.
El año pasado cerramos la temporada con un divorcio, aunque lo mismo usar ese término es pasarse un poco, pero si que era un poco esa la sensación que daba: Poppy e Ian se marchaban de la empresa para seguir la visión de proyecto que tenía ella mientras que el propio juego de “Mythic Quest” caía en manos de David. Una season finale que planteaba un cambio total del paradigma de cara a su siguiente temporada y ese cambio de paradigma es el eje central toda la nueva temporada.
Nos encontramos ante una Mythic Quest algo distinta, que aunque mantiene su habitual tono de humor se aleja del juego para hablar más de los personajes. Lo cual no es un cambio muy grande, pues no es raro que las comedias se desarrollen en torno a su grupo de personajes principales; sin embargo, en el pasado esta ficción daba mucho peso al propio juego como como detonante de muchas de las cosas que pasaban. Tras lo que aconteció en el final de la segunda temporada esto es algo que prácticamente desaparece, siendo el título de la propia serie un guiño a sus orígenes que el centro de la misma o el detonante de las tramas.
Voy a evitar entrar en detalles de los puntos que se van a tocar durante estos episodios o de qué va a ir el episodio flashback de rigor (sí, esto se ha convertido en un recurso habitual de la ficción y al igual que el año pasado está muy bien hilado con la trama de la temporada, aunque debo reconocer que no me ha parecido tan bueno que el de su segunda temporada), pero sigue manteniendo la tónica de coger elementos o temas de actualidad de la industria tecnológica (orientado obviamente al mundo de los videojuegos) para tratarlos a su manera. En ese sentido, puedo asegurar que el cambio de foco no ha supuesto tampoco un cambio de estilo dentro de la propia forma de hacer las cosas de la serie.
Apple nos presenta una nueva temporada que si bien creo que no es tan brillante como la segunda, tampoco sería justo decir que baje el nivel, simplemente que a mi parecer la ha faltado algún episodio sobresaliente como si que los tuvo el año pasado; sin embargo que nos haya ofrecido 10 capítulos de notable alto no es algo que lamentar.
Mythic Quest vuelve a demostrar que es una gran comedia que posiblemente merezca más repercusión que la que tiene en realidad y otra ocasión más en la que se puede ver que Apple va en serio con su plataforma.