Durante los últimos meses, se han sucedido las noticias en torno a Ezra Miller y sus conductas de dudosa legalidad, y comportamientos inapropiados en múltiples situaciones, a cada cual, más rocambolesca. DC y Warner están atravesando una fase complicada, con toda la cuestión de su fusión con Discovery, y algunos recortes realizados, por motivos no comparables a lo que está realizando Miller. Por lo tanto, ante la acumulación de casos del actor, las dudas se incrementan sobre qué pasará con la cinta que, supuestamente, se estrenará el año que viene. Os contamos qué se sabe actualmente al respecto.

Nos hacemos eco de las informaciones publicadas por el portal The Hollywood Reporter en el día de ayer. Cabe recordar que, el pasado mes de marzo, os contamos que se había producido un cambio en la agenda de Warner de lanzamientos de sus películas de DC, dado que The Flash iba a estrenarse a finales de 2022, y pasó en ese momento al 23 de junio del 2023.

Pues bien, ante la tesitura de qué hacer a continuación, el medio estadounidense nos habla de tres posibles escenarios para solucionar el tema, aportados por una fuente cercana al asunto:

• Primera opción: en Warner han recibido indicaciones que el actor buscaría ayuda profesional al regresar a su hogar en Vermont. Si sucediera, Miller (cuyos pronombres son de tercera persona del plural, “they/them” en inglés), podrían dar una entrevista en algún momento, explicando sus comportamientos a lo largo de los últimos años. Harían eventos de prensa puntuales para The Flash, y la película se estrenaría en cines como está previsto.
• Segunda opción: Aunque Miller no buscaran ayuda, Warner lanzaría la cinta de todas formas. No obstante, estarían al margen de todas las cuestiones relacionadas con el marketing y la publicidad de la misma. Para futuros proyectos, buscarían un recambio para el personaje de Barry Allen en el universo cinematográfico de DC.
• Tercera opción: La situación con Miller escala a peor. En este caso, Warner se cargaría la película del todo, y no sería rodada de nuevo con un actor distinto, dado que Miller interpretan a diferentes personajes y están prácticamente en cada escena. La película ha costado alrededor de 200 millones de dólares, y su cancelación supondría un hecho sin precedentes.

Por recapitular los diferentes crímenes que le han puesto en el punto de mira:

• A principios de semana, se les acusó de un delito grave de robo con allanamiento de morada que tuvo lugar en mayo, donde robó una gran cantidad de botellas de alcohol de la casa cuando los dueños no estaban presentes, y tras efectuar sus pesquisas, la policía de Vermont habría encontrado pruebas suficientes para acusarles.
• En abril les arrestaron en Hawaii y les ficharon como sospechosos de agresión en segundo grado, pero ya en marzo también les arrestaron, tras causar desorden público y acoso en un bar de karaoke de la isla.

¿Qué os parece todo esto? ¿Qué futuro le auguráis a la película de The Flash?