The Time Traveler’s Wife: un amor a prueba del tiempo
En este contexto de “streaming wars” en el que vivimos, HBO va a encadenar en 2022 series con formato semanal, y seguramente todas van a estar (salvo sorpresa) entre lo mejor del año, al menos para mí: la segunda entrega de Euphoria; la temporada debut de Winning Time; la recién promocionada cuarta de Westworld; el regreso a Poniente con House of the Dragon; una que cubrirá los últimos meses del año; y de la que os voy a hablar hoy y que podremos ver a partir de mañana en HBO Max: The Time Traveler’s Wife (La Mujer del Viajero en el Tiempo). Os cuento más sobre ella, a continuación.
NOTA: el artículo trata sobre la primera entrega de la serie, a la que hemos podido acceder gracias a Warner Media España. NO contiene spoilers.
Este proyecto comenzó a fraguarse en 2018, cuando se anunció por parte de HBO que había contratado a Steven Moffat como showrunner de la serie, y sería la segunda adaptación de la novela homónima de Audrey Niffenegger, ya que se hizo una película en 2009, con Eric Bana y Rachel McAdams como protagonistas. En el momento en el que se dio a conocer la noticia, Moffat comentó que escribió un episodio de Doctor Who inspirándose en el libro; el capítulo en cuestión es The Girl in the Fireplace (2×04), uno de los más especiales de la serie británica. También dijo el creador británico que, tiempo después, la autora incluyó en su siguiente novela una referencia a este episodio precisamente. Todo este preámbulo en forma de anécdotas varias me sirve para traer a colación el nombre del principal responsable de la serie, y quizá una de las causas de que haya salido un producto tan bueno como The Time Traveler’s Wife.
Y es que Steven Moffat tiene ya experiencia con la temática de ciencia ficción, y de viajes en el tiempo concretamente. En la afamada ficción de BBC elaboró algunos de sus mejores guiones (entre ellos, el citado 2×04), y su etapa como responsable al mando de la serie alternó momentos de brillantez con otros de claro desgaste, lo que no quita para afirmar que Moffat tiene el nivel suficiente para tomar las riendas de una producción de HBO como la que nos atañe, y así lo ha demostrado con esta primera entrega.
Lo voy a decir ya: The Time Traveler’s Wife es, para mí, si no el mejor estreno de los que llevamos de año, de los mejores. Estos días estoy compaginando diferentes ficciones que irán llegando próximamente a nuestras pantallas (y sobre las que podréis leer en esta web), y ninguna me ha producido el efecto de esta serie, y de las vistas en estos cinco primeros meses de 2022, tampoco; es más, de todo mi listado de veteranas ya en emisión, me cuesta pensar muchas que superen lo que me han mostrado aquí.
Sé que estoy poniendo el listón alto con estas afirmaciones, pero todo lo que he visto en los seis episodios que componen esta entrega me ha gustado.
Por unas cosas o por otras, me he encontrado en estas últimas semanas con varias ficciones cuya temática gira en todo o en parte alrededor de los viajes en el tiempo. De todas ellas, la forma de tratarlo aquí me ha parecido la mejor, y pese a la cantidad y tan variada de series sobre el tema, me ha resultado refrescante ver cómo lo abordan aquí.
Uno de sus dos protagonistas, Henry, es el viajero al que hace referencia el título, pero no es como en otras obras que lo hace para cambiar algo del pasado o del futuro, o un incidente le deja atrapado en otra época, o circunstancias similares. Tiene un defecto genético, que, en determinados momentos, le provoca saltar atrás o adelante de la época en que se encuentra, y luego regresa de vuelta a su momento presente. Él no busca eso, y además cada salto le trae más problemas que alegrías, empezando porque siempre llega a la época de destino completamente desnudo; encima, no siempre cae en su casa o en un lugar resguardado: puede aparecer en mitad de una carretera, en una plaza pública con muchos viandantes, o en otras situaciones variopintas y que le ponen en peligro.
Sus saltos parecen aleatorios, pero están directamente conectados con personas a las que él quiere. Y aquí entra la otra gran parte de la serie: Clare, la mujer del viajero en el tiempo. Creo que en una serie en la que la dupla protagonista lleva el peso principal de la historia, era fundamental que los intérpretes principales tuvieran química en pantalla, y eso se cumple con creces aquí. Rose Leslie, que da vida a Clare, y Theo James, que interpreta a Henry, funcionan de maravilla y transmiten a la perfección lo que sienten sus personajes en cada momento durante la entrega. Mención especial al casting para las versiones jóvenes de Clare, que me han gustado más que las de Henry, aunque también cumplen de sobra.
La estética, la factura técnica, la dirección de David Nutter, la música de Blake Neely… todo funciona como un reloj suizo y nos mete de lleno en la trama, y aunque no seáis fans de la parte de ciencia ficción, creo que va a enganchar a la gente y no va a suponer un problema. Decía antes que había visto recientemente muchas con una temática similar. Mientras que unas, directamente, usan mal el viajar en el tiempo, otras lo usan cuando les interesa y lo hacen mal, la mezcla entre la historia de amor de Clare y Henry y los viajes en el tiempo se combinan perfectamente y conforman un todo, ya que no se entiende lo uno sin lo otro.
En solo seis episodios, podemos encontrar focos de atención como el determinismo, el libre albedrío, las diferentes ópticas sobre una relación de pareja, la pérdida, la mala fortuna… pese a que Henry y Clare viven una historia de amor que a mí, personalmente, me ha cautivado, en la serie no son ajenos a los problemas que cualquier pareja experimenta, y también hay momentos tristes y difíciles, que enriquecen el relato y dan una visión tridimensional de situaciones con las que muchos espectadores podrán identificarse, conectándolo de raíz con los viajes en el tiempo. Tiene un mérito tremendo decir tanto en un formato así, cuando hemos asistido a series que, con más tiempo por episodio y más capítulos por entrega, dicen tan poco y resultan tan vacías.
Evidentemente no voy a dar detalles concretos, primero porque el embargo no me lo permite, y segundo porque es una experiencia que tenéis que vivir. The Time Traveler’s Wife pasa para mí directamente a mi clasificación personal como una de las mejores del año, por todo lo que os he contado y más que os encontraréis cuando empecéis con ella. HBO sigue dejando patente su calidad con cada año que pasa, y el aura que desprende esta serie la convierten en una de las producciones más especiales que han estrenado últimamente.