Os cuento. Ya os dije en una de las reviews anteriores que en The CW habían sacado la guadaña y estaban empezando a cortar cabezas, es decir, a cancelar series. Legacies todavía está pendiente de que se decida su destino, pero el movimiento que ha efectuado la cadena en su programación no es demasiado alentador, dado que ha detenido la emisión de la ficción hasta el próximo 2 de junio, día en que se retomará la cuarta entrega. Este tipo de cambios, sin haberse dicho previamente qué pasará con el futuro de la tercera serie del universo de The Vampire Diaries, me dan mala espina. Solo cabe esperar a la decisión final, así que vamos con lo que ha deparado el decimoséptimo episodio.

La acción se reanuda justo donde la dejamos en el 4×16, con Hope y Landon reunidos de nuevo tras casi media temporada separados, por razones evidentes. Ya comenté en la review anterior que volver a juntarlos no me parecía una decisión muy acertada, aunque dependía de qué hicieran con su relación. En una entrega que hubiera tenido menos episodios (va a tener veinte), creo que este movimiento se lo hubieran ahorrado, porque ya habíamos asistido al proceso por parte de Hope de recuperar su humanidad, y también con Lizzie había hecho las paces, y estaba concienciada acerca de ayudar a sus amigos. Por lo tanto, esta parada en el limbo ha cortado el ritmo de acontecimientos, y con menos capítulos, dudo que la hubieran efectuado.

Pero es lo que hay, y tenemos que rellenar minutos. Si este movimiento se hubiese efectuado para darle bola a algún secundario menor, sin demasiado impacto en la trama, me habría molestado, pero dado que es la protagonista, me sirve. Sobre todo por la conclusión a la que llegan Hope y Landon, y que tengo la sensación que ya la habíamos asumido todos, y diría que ellos mismos también: que no pueden estar juntos, y que ella debe volver para defender juntos la Escuela.

Con Malivore eliminado, y Landon siendo una parte esencial de ese entramado, creo que los guionistas se dieron cuenta que no podían mantenerlos juntos, porque el hecho de haber extendido la trama del villano principal había hecho que se quemara en el proceso la relación de ambos. El fandom en general se cansó de Hope y Landon, y la decisión de que ella lo sacrificara para salvar al mundo fue la correcta, en mi opinión. Por eso no acabo de entender a qué responde el llevarla con él, y que aten cabos para acabar en el mismo punto que alcanzaron cuando la protagonista lo mató. A estas alturas, no sé cuántos espectadores querrían que volviesen a estar juntos, ni si argumentalmente casa con lo que vivimos actualmente. La serie ha funcionado bastante bien sin ellos compartiendo espacio, así que, por mi parte, me alegro de que hayan dejado a Landon en el limbo (aparentemente, por mucho tiempo), y a Hope de vuelta a la realidad.

Otro foco del episodio ha recaído en Lizzie y MG. Sus escenas sirven para dos cosas: que lleguen a un punto en el que las cosas se han aclarado entre ambos, con declaración mediante por parte de él (nada que tampoco supiéramos todos, incluida ella); y para que el contador se ponga en marcha sobre Ethan. Episodios atrás, nos avisaron de que el conflicto contra los dioses traería consecuencias en forma de potenciales muertes. Me pareció en su momento que se metían en un jardín, porque si lo manifiestas en voz alta, debes hacer algo al respecto; es decir, avisando de que moría alguien, quedaría raro que se salvaran todos los personajes. No obstante, hay formas y formas.

Recurrir a Ethan como carne de cañón es la salida fácil. Es uno de los últimos personajes en ganar peso y relevancia en la serie, pero no deja de ser un secundario prescindible. Narrativamente no sé hasta qué punto se podría justificar que cayera alguno de los principales, a los que yo considero, al margen de Hope, a Lizzie, MG, Alaric, y quizá Kaleb; por lo que sin duda es mucho más sencillo quitar piezas del tablero como Ethan, o incluso Jed me encajaría. Dado que cada vez que use sus poderes, va perdiendo fuerza vital, un escenario en el que se sacrifique para dar a sus amigos la ventaja definitiva, o como escudo para salvar a alguien (MG o Lizzie como principales candidatos), me cuadra. Llegado el momento veremos si es acertada la decisión y está bien ejecutada, pero, de entrada, creo que es un movimiento sencillo para no complicarse la vida.

Con Aurora y Ken ya aliados, Ben incorporado como aliado para la causa de la Escuela, y Hope recuperada y lista para la batalla, dejamos la serie hasta dentro de tres semanas, momento en el que se reanudará para que se emitan los tres episodios finales en junio. Ya digo que me parece un cambio llamativo, y no para bien precisamente. Estaremos atentos a las novedades que puedan llegar, y espero que la próxima review abra diciendo que la serie ha sido renovada y no cancelada. Me despido hasta el mes que viene, recordándoos que podéis dejar vuestros comentarios en la entrada, y seguirnos a través de las redes sociales que aparecen en la derecha de la web. Hasta la próxima.