Super Pumped: las batallas de egos por Uber
En el sector de las plataformas streaming y cadenas de cable, las hay que han llevado mejor que otras la transición hacia la nueva era del consumo televisivo. Showtime no lo ha notado tanto como otras competidoras de cable, y lanzamientos como Super Pumped mitigan la diferencia entre los servicios bajo demanda y los productos que ofrecen estas cadenas de pago americanas. Vamos con mi opinión sobre lo que he podido ver de esta nueva serie, que llega el 3 de marzo a Movistar Plus.
NOTA: el artículo trata sobre los cinco primeros episodios de la entrega inicial de Super Pumped, a los que hemos podido acceder gracias a Movistar Plus. NO contiene spoilers.
Para empezar, hay que señalar unos detalles importantes: nos encontramos ante una serie con formato de antología, es decir, que cada temporada contará una historia diferente; ha sido ya renovada antes de su lanzamiento por una segunda entrega, que explorará Facebook y la relación en el centro de esa metamorfosis entre Sheryl Sandberg y Mark Zuckerberg, y las fuerzas que cambiaron el mundo, desatadas internacional y no intencionalmente; y esta primera tanda de episodios llevan por título “The Battle For Uber”, basándose en la historia real de la creación de la compañía de servicios de transporte americana que, a su vez, está narrada en el libro en el cual se ha inspirado, con el mismo nombre y escrito por Mike Isaac.
Dicho esto, nos presentan el viaje de Travis Kalanick, el emprendedor visionario que busca revolucionar el mercado, abriéndose paso con su nueva idea que cambiará la concepción del transporte urbano de personas, mediante su marca Uber, compitiendo de frente con el servicio de los taxis. Aquí en España la tenemos en las grandes ciudades de nuestra geografía, pero no es una opción tan asentada como en Estados Unidos. De hecho, si sois de los que echáis un vistazo regularmente a las noticias, seguramente recordéis que en los últimos años han ido surgiendo de tanto en tanto conflictos sobre la implantación más o menos extendida de la empresa en el territorio nacional, y las medidas del Gobierno para regularlo. Por lo tanto, desde el punto de vista patrio, sentarse a ver la evolución de esta compañía, y lo que sucedió con su creador, igual no es el argumento más atrayente, porque no tenemos una conexión tan directa como los ciudadanos estadounidenses.
No obstante, nos encontramos ante un buen producto, que tiene reminiscencias de obras como El Lobo de Wall Street, en la forma en la que nos muestran cómo se comporta Travis en su entorno laboral, y también en el personal; y, por supuesto, con Billions y la figura de Bobby Axelrod, dado que sus showrunners, Brian Koppelman y David Levien, vienen de la serie compañera de cadena, y junto a Beth Schacter forman el equipo creativo detrás de la producción de nueva ficción de Showtime. Si os gusta el estilo de esta serie, tenéis mucho ganado con Super Pumped, ya que a mí me ha resultado una suerte de hermana pequeña de la que protagonizó Damian Lewis junto a Paul Giamatti durante cinco entregas.
Y es que, como en Billions, tenemos a dos figuras masculinas muy por encima del resto de miembros del reparto: la de Travis, interpretado por Joseph Gordon-Levitt, y la de Bill Gurley, a quien da vida Kyle Chandler (Friday Night Lights). Ambos son los que llevan el peso de la ficción y sus respectivas actuaciones son lo más destacado de una producción que incluye en su material promocional a la figura de Uma Thurman (Kill Bill, Pulp Fiction) con su rol como Ariana Huffington, pero que, sinceramente, con respecto a lo que he podido ver hasta el momento, no la veo equiparable a los dos protagonistas masculinos; eso sí, el rol de la actriz es más relevante que el que tiene en otra serie de la que he hablado recientemente en este blog, y que también se estrenó en febrero y la usó como reclamo en su material promocional: Suspicion, de Apple TV Plus.
De hecho, una actriz que esperaba que tuviera mayor impacto en esta serie es Kerry Bishé, que fue una de las protagonistas de la gran Halt and Catch Fire, pero que aquí es una mera secundaria, con algunos momentos de cierta importancia, pero lejos del peso principal de la trama. Y es que, quizá una de las mayores pegas de esta producción sea que, al margen del tándem protagonista, no hay secundarios que destaquen en demasía, roben el show o, por lo menos, sientas que pueden competirle tiempo en pantalla al protagonista. Como en el caso del personaje de Bishé, Austin, hay algunos cuyas subtramas impactan de tanto en tanto con el conflicto principal, pero el foco de atención está puesto en Travis y sus luchas de poder, tanto contra el sistema en el que intenta abrirse hueco, como internas, con su gestión de esa compañía.
Es una serie con mucha testosterona, y si no empatizas mínimamente con su protagonista o, al menos, lo soportas, dudo que seas capaz de ver más de un episodio. Precisamente esta serie se aprovecha de ello para exponer casos bastante flagrantes de situaciones de acoso laboral, discriminación por razón de sexo, y prácticas de dudosa moralidad y/o legalidad. Dicen que la realidad supera a la ficción, y si esta serie dedica bastante rato de pantalla a detallarte exactamente cómo impacta en la práctica laboral de una mujer el hecho de denunciar el acoso sufrido por parte de compañeros masculinos, yo prestaría atención y no me sorprendería, porque, tanto en esa empresa como en otras muchas, pasarán cosas similares y peores. Por desgracia, es algo que sigue sucediendo en 2022, y que se ponga el foco en todo ese ambiente de masculinidad tóxica y prácticas heteropatriarcales me parece un acierto, a la par que coherente por cómo te describen lo que es Travis y su forma de llevar una empresa.
Como nota curiosa, tenemos en versión original la voz de Quentin Tarantino, que no es una voz en off casi permanente como en el caso de Dexter o You, sino que, en cada episodio, tiene momentos en los que aporta su punto de vista sobre conceptos que se describen, opiniones sobre la persona involucrada en la escena de turno, o simplemente para lanzar algún improperio por cómo se desarrolla la trama. Me parece un acierto, que suma al conjunto de la ficción.
Mis sensaciones son positivas, y creo que Super Pumped puede ser una serie que consiga abrirse un hueco en este mundillo tan competitivo que tenemos actualmente, siendo una de las ficciones de estreno de 2022 recomendables, o que merezca la pena echar un vistazo. Me falta ver la recta final, pero lo visto hasta ahora no me hace pensar que las cosas se tuerzan de cara a su conclusión. A partir del jueves 3 de marzo, un capítulo cada semana en Movistar Plus.