Review Legends of Tomorrow: Paranoid Android y Lowest Common Demoninator
Tras el parón vacacional regresa Legends of Tomorrow y también vuelven nuestras reviews de cada episodio, aunque en esta ocasión hagamos una review conjunta del octavo y noveno episodios de la séptima temporada: Paranoid Android y Lowest Common Demoninator.
Estos dos episodios han sido tremendamente originales, pues en uno ni siquiera vemos a nuestros personajes sino que nos cuentan la historia de sus enemigos y en el otro los guionistas juegan a situarnos como espectadores de un reallity del infierno.
La temporada se fue de hiatus después de una fiesta donde celebraron la construcción de aviones de guerra por parte de un montón de mujeres, entre las cuales había muchas negras. Con ese acto nuestro equipo adelantó unos años un importante acontecimiento histórico. Los ambientes de trabajos sin segregación racial y encima en una fábrica donde trabajaban mayoritariamente mujeres era una cosa bastante insólita para la época, así que el adelanto de tamaño suceso no pasó desapercibido para Evil Gideon, que envió a la fábrica a sus esbirros con la misión de acabar con las leyendas… misión que se cumplió en parte, pues un aliado de los Legends falleció sacrificándose por el resto.
Paranoid Android nos ofreció un punto de vista diferente, desde la intro inspirada en el estilo de The A Team a las estéticas modificadas de los personajes tuvimos un capítulo muy distinto a lo habitual. Ni vimos a nuestros personajes si quiera. Después de varias semanas de parón, la serie regresa y no nos reúne con nuestro equipo sino que nos enseñan el punto de vista de sus enemigos. Así pues nos fuimos de viaje con las versiones androides esbirros de Evil Gideon. En un primer momento parecía que estos androides no eran necesariamente villanos, simplemente se creían en el camino correcto y actuaban en consecuencia. Nos dibujan la idea de que este grupo de leyendas cree ser el auténtico grupo de leyendas y cree perseguir a un equipo formado por androides. Entendiendo eso, lo lógico era pensar que una vez que descubrieran la verdad tomarían la decisión correcta y volverían al camino del bien. Cosa que no ocurrió al final.
Sara descubrió la verdad y la compartió con Zari, pero Evil Gideon logró someter a la robot Zari prometiéndole una inmensa capacidad cerebral. Desgraciadamente Zari aceptó, traicionó a Sara y las aguas volvieron a su cauce. Es decir, todos los villanos se comprometieron más con el mal y mientras al principio del episodio conocemos a una serie de leyendas que intenta hacer lo correcto (aunque usando métodos incorrectos), al final del episodio los vemos totalmente convencidos de seguir la senda del mal. Sara es la única que no toma esa decisión de forma consciente, pero tan sólo es necesario un maléfico upgrade para convertirla en una minion obediente.
Creo que la propuesta de Lowest Common Demoninator no ha sido especialmente original, al menos si la comparamos con la idea detrás de Paranoid Android, pero pese a esa supuesta falta de originalidad, me he divertido mucho más con nuestros chicos sometidos a los designios de un reallity infernal que con la pandilla de androides. Supongo que me han gustado los primeros planos, las tomas de ángulos forzados y el ambiente ensombrecido por unas infinitas ganas de polemizar de todos y cada uno de los personajes.
En Paranoid Android nos colocan una versión de Nate con unos biceps extremadamente fornidos y en el siguiente episodio lo vemos convertido en un medio tontorrón chulo de playa, típica carne de cierto tipo de reallity. En ambos episodios exageran las características del personaje y creo que las dos versiones nos ofrecen momentos muy frescos y muy cómicos. Si en Lowest Common Demoninator nos divertimos viendo una versión de Sara al más puro estilo de una típica Karen de un meme anglosajón, en el episodio anterior conocimos a una Sara, que pese a ser un androide, se negaba a cumplir órdenes y se planteaba la ética de sus actos, de su misión, de su equipo. La Sara androide termina con el cerebro lavado y la otra Sara nos enseña una versión de si misma frívola y obsesionada por escapar física y mentalmente de la vida que están teniendo en los últimos tiempo, donde los personajes no cesan de lidiar con diferentes terrores… entre los cuales incluso se encuentran unas versiones despiadadas de ellos mismos. Tanto ver a Spooner desnuda moviéndose por la casa con una naturalidad maravillosa; como ver a Sara convertida en una pantomina superficial y ridículamente divertida; como la estúpida pelea entre Zari y Nate, donde ambos se preocupan por la otra Zari e intentan, a la vez, acercarse y alejarse de si mismos. A la vez, Astra y su enamorado tienen sus momentos de tensión que nos ayudan a que Behrad muestre mucho más de su personalidad y crezca como personaje. Ava ejerce de madre responsable de todo el equipo y Gywin decide hacer trampas con la promesa obtenida de Sara.
En Lowest Common Demoninator nos censuran las oraciones de Gywin, que bendice la mesa y nombra a Dios en varias ocasiones…. Lo de censurar el cuerpo desnudo de Spooner no creo que sea cosa del infierno, si no más bien de la CW. En todo caso, ambos detalles han sido tremendamente divertidos, a la altura de la persecución de Gary por parte de todos los demás.
Hemos avanzado en las relaciones personales entre los personajes, no sólo las parejas han sido capaces de soltar sus sentimientos. Behrad ha mostrado mucho sobre si mismo, nos ha explicado parte de su vida y nos ha mostrado la razón por la que mantiene esa actitud zen frente a todo, algo que en su caso es más un mecanismo de huida que otra cosa.
Me ha gustado mucho el discurso final de Gideon, no tanto como la declaración sincera de Behrad, pero muy bonito también. Supongo que hemos tenido un par de buenos discursos de amor sincero y eso siempre está bien.