Vale, admito que puede ser que me haya retrasado un poco y que esta review doble podría haber sido perfectamente una triple pues cuando estén leyendo esta líneas se habrá emitido otro episodio más de Star Trek: Discovery, pero como eso ya sería pasarse prefiero tener dos textos muy pegados en el tiempo que el desgranar 3 capítulos distintos en una misma review. Vayamos al lío.

¿Qué nos hemos encontrado y cuanto a avanzando la serie en la trama general? Respecto a lo último no es que nos encontremos un gran avance pero si que podemos ver que la temporada empieza a mostrar sus cartas de cara a ir entrando a la mitad final de temporada y es que lo que sí que podemos tener claro es que detrás de esa anomalía que está destruyendo planetas hay alguien detrás.

Respecto a lo que ha pasado nos encontramos dos puntos que difieren bastante, para empezar el episodio de “All is possible” profundiza en Tilly, personaje al que habíamos visto tener problemas de adaptarse a esta nueva línea temporal en capítulos anteriores y que en esta ocasión la toca estar al mando de un grupo de cadetes de la flota estelar en una maniobra de prácticas que como iba a ser evidente se tuerce al estrellarse la nave en un planeta hostil.

Un primer episodio que aunque toma como foco principal toda la trama de supervivencia de Tilly, también toca la baza de la trama política dentro de la expansión de esta nueva Federación con Michael, trama que sinceramente me parece la menos atrayente de todas las que nos han estado presentando en este arranque de temporada y que espero que por lo menos la puedan hilar con la de la anomalía.

Y hablando de la anomalía, esta es posiblemente el eje central del siguiente episodio: “The Examples”, en el que aparece para arrasar una serie de planetas entre los que se cuenta un asteroide con una prisión de la antigua cadena esmeralda, a la cual Michael y Booker deberán ir para trasladar a unos presos que han sido abandonados allí a su suerte y cuya supervivencia choca con la nula confianza que sienten hacia los miembros de la flota estelar.

A lo largo del capítulo vemos como poco a poco intentan ganarse la confianza de los presos y vamos conociendo un poco la historia detrás del que hace las veces de líder y que en su sentido de la justicia, prefiere quedarse a morir para pagar por su crimen que el ser rescatado. Esta decisión de ese hombre posiblemente haya puesto un piedra en el camino de la relación que hay entre Michael y Booker, pues aunque ella aceptó la voluntad del reo, para Booker no era de recibo dejar a nadie atrás por mucho que fuera decisión de esa misma persona.

Por otro lado, dentro de la Discovery nos encontramos con experimento que a parte de poner en peligro a toda la nave, sirve para confirmar que hay alguien detrás de la anomalía y presentarnos a un científico llamado Ruon Tarka que aparenta saber más de lo que dice y que tiene pinta de ser alguien muy importante en el futuro de la serie.

Nos hemos encontrado ante un par de episodios entretenidos, pero sinceramente echo de menos que la serie ponga un poco más de carne en el asador, pues da la sensación de que a duras penas han profundizado en la trama principal y que cuando lo hacen es de una forma bastante tímida, como quien mete un pie en la piscina pero llega a entrar del todo. Aunque agradezco estos episodios que le dan un poco más de espacio a muchos personajes, creo que ya va siendo hora de que la temporada decida un foco de atención y se centre completamente en él.