Historias para no Dormir, ¿o sí?
En una época en la que se han cruzado varias series españolas en mi constante búsqueda de nuevos estrenos televisivos, tengo que decir que, por una parte, estoy contento porque vayan llegando novedades de nuestro país en las diferentes plataformas de vídeo bajo demanda que tenemos en el cada vez más amplio catálogo; por la otra, no es que me hayan entusiasmado la mayoría, salvo una. Os dejo mis impresiones de Historias para no Dormir.
NOTA: el artículo trata sobre la primera entrega de la serie, a la que hemos podido tener acceso gracias a Prime Video España. NO contiene spoilers.
RTVE y Prime Video colaboran de nuevo juntos, tras dejarnos ficciones como Parot o Inés del Alma Mía. En esta ocasión, el producto a tratar es un remake de la ficción clásica homónima, que dirigió y realizó Narciso “Chicho” Ibáñez Serrador, entre 1966 y 1982. Lo que ahora tenemos tan asimilado en televisión, con ficciones como Black Mirror como principales exponentes, ya se contaba en nuestro país hace unos cincuenta años. En la edición de antaño, el cineasta adaptó historias de autores como Edgar Allan Poe o Ray Bradbury, además de crear sus propios guiones. La que llega el próximo 5 de noviembre, es producto de nuestra época, con vistazos a posibles futuros.
Cuatro episodios componen la entrega, cada uno independiente del resto, y con una historia cerrada: El Asfalto, El Doble, Freddy y La Broma.
- El primero tiene como protagonistas a Dani Rovira (Ocho Apellidos Vascos) e Inma Cuesta (El desorden que dejas); los guionistas son Manuel Jabois y Rodrigo Cortés.
- El segundo está protagonizado por David Verdaguer y Vicky Luengo (Antidisturbios), actriz que repite bajo la dirección de Rodrigo Sorogoyen.
- El reparto del tercero lo forman Miki Esparbé (Reyes de la Noche), Adriana Torrebejano (Tierra de Lobos) y Carlos Santos (Los Hombres de Paco), este último interpretando a Chicho Ibáñez Serrador. Dirige Paco Plaza (franquicia REC).
- El último tiene como trío protagonista a Eduard Fernández (30 Monedas), Nathalie Poza (La Unidad) y Raúl Arévalo (Antidisturbios), en el que participa también Rodrigo Cortés, dirigiéndolo.
Solo hay uno que destacaría por encima del resto: Freddy. Para mí es el mejor con mucha diferencia, no solo porque el hecho de ser un episodio muy meta, con la presencia del creador original en el rodaje de una cinta que trajo cola, sino porque la historia del episodio me convenció, en comparación con las demás vistas durante la entrega. El resto, no me gustaron tanto, y alguna me parece directamente mala. Con una duración variable, que oscila entre los cuarenta y cinco y sesenta minutos, la mayoría no destacan por tener una trama que te mantenga pegado al televisor mientras sucede la acción, sino más bien llegando al punto de ser bastante anodinas.
Lo que podría haber sido un producto interesante, se queda a medio camino y traerá disparidad de opiniones, ya que el formato propicia eso. Aún así, no creo que las tramas que nos cuenta hayan sido las mejores elecciones. Si en su día Historias para no Dormir podría considerarse como pionera en este género, ahora su remake se queda como una más de la colección de series antológicas que tenemos en el amplio catálogo de cadenas y plataformas de vídeo bajo demanda. Si sois amantes del género, o si tenéis nostalgia de la original, podéis echarle un vistazo, y juzgar por vosotros mismos, pero no creo que estemos ante uno de los estrenos más destacados de este 2021, sino más bien lo contrario.