La nueva ración semanal de Titans nos ha dejado un episodio de transición, o eso me lo ha parecido a mí. A tan solo cinco de que la tercera entrega concluya, las sensaciones que transmite la serie es que, después de un arranque bastante potente, hemos entrado en una etapa valle, para encarar la recta final con más fuerza… o pegársela como viene siendo habitual en años anteriores. Vamos con el 3×08.

En la review anterior comenté que había dos frentes dentro del grupo de héroes protagonistas, pero viendo lo que nos ha ofrecido este “Home”, matizaría más: tenemos a Gar, que sigue creyendo que la redención de Jason es posible, aún habiéndose llevado por delante a Hank; Kory y Conner que piensan que ya no hay marcha atrás; y metería un tercer grupo en el que estaría Dick, que se debate entre una postura y otra, con lo último que le dijo Bruce de fondo, eso de “sé un mejor Batman”. 

La cuestión es si los Titanes pueden dejar de lado todo lo que pasó, y afrontar esto como una familia, mirándolo desde la óptica de que todo se perdona y con los tuyos siempre puedes volver, aunque, sinceramente, lo veo demasiado Disney y poco realista. Muchas veces, por mucho que la sangre sea lo que te una, o el sentido de comunidad o afinidad en el caso de nuestros héroes, hay actos que son irreparables. Gar les recuerda que, en la segunda temporada, cuando estuvo bajo el control de Cadmus, hizo cosas horribles, y le acogieron de nuevo como si nada; lo de Jason, bajo mi punto de vista, es distinto. Ha ido a por ellos, ha matado a Hank de una forma cruel, y los ha tenido como objetivo hasta que se le han acabado las dosis del chute de Crane, que es cuando ha empezado a recoger cable. Si yo estuviera ahí, creo que optaría por no darle carta blanca y no hacer que fuera agua pasada todo lo vivido este año. 

Ahora mismo, Jason está contra la espada y la pared. Recurre a Dick para intentar volver con los Titanes, pero ni el anterior Robin es capaz de aclarar sus ideas en estos momentos. Unido a que el resto del grupo no le ve con buenos ojos precisamente, no le auguro un buen final a Jason, si siguen por el camino actual, claro. Si de repente le dan la vuelta a la tortilla y se vuelve todo color de rosa, pues sí, puede acabar volviendo con el grupo. Ojalá no suceda esto, y sean consecuentes con todos los actos perpetrados por Jason. Sí, es un chaval descarriado y que está roto psicológicamente, pero eso no le exculpa de todo. Ha matado a Hank, un miembro de esa familia a la que tanto desea volver. Mal asunto, la verdad.

Encima, se ha juntado con ese final de capítulo, en el que yo he entendido que los héroes piensan que ha sido él el que ha disparado a Tim. ¿Recordáis al chaval que vimos en el 3×01 y que volvió a salir en el 3×06? Bueno, pues ya se ha presentado oficialmente y pretende, ni más ni menos, que convertirse en el nuevo Robin y formar parte del grupo. Cualquiera que tenga un mínimo conocimiento de los cómics de DC sabe quién es Tim Drake, pero para el que no, me abstengo de desvelar su destino. El chico la verdad es que tiene buenas habilidades, ya que es capaz de llegar a la conclusión de que Dick era el Robin original, luego fue Nightwing, y Bruce es Batman; incluso que Jason fue el segundo. Esto dice mucho de él, y poco de la policía de Gotham, porque si un chico cualquiera, con un poco de dedicación, es capaz de ver los patrones en los movimientos y tácticas de Dick y compañía, igual un profesional también debería serlo, pero claro, el cuerpo de policía de esta ciudad, en fin, qué os voy a contar. Supongo que le curarán de alguna manera, porque no ha dicho la última palabra en Titans.

Dos puntos más. Las visiones de Kory parecen indicar que un bebé está en camino, o así lo he entendido yo. ¿Se viene descendencia tamariana-kryptoniana? Y luego, el cliffhanger es que, la propia Kory cae en la trampa que diseña Crane y propicia que la droga que ha elaborado acabe en el sistema de reparto de agua municipal, así que los ciudadanos de Gotham van a pasárselo muy bien en muy poco tiempo. Tiene pinta de que se va a liar, a ver si es verdad. Nos vemos en la próxima review.