La entradilla de hoy no estará centrada en repasar lo que había pasado en Legacies antes del parón ni nada; si queréis saberlo, os remito a mis reviews anteriores. No. Voy a criticar, y he perdido la cuenta ya de las veces que lo he hecho, a HBO España y su servicio lamentable con ciertas series. Sí, no son vuestras producciones originales, pero también ofrecen ficciones que no son propias suyas plataformas como Amazon Prime o Netflix, y el día que dicen que un episodio estará disponible, lo está con todas las opciones de audio y subtítulos. Es inconcebible que yo haya visto hoy martes el 3×06 de Legacies y, sí, estén todas las posibilidades a mi disposición, pero los subtítulos en castellano, hacia la mitad del episodio, cobran vida propia y van a ritmo diferente de lo que está sucediendo en pantalla. Para alguien que no tenga un conocimiento del inglés avanzado (no es mi caso), o no esté acostumbrado a leer subtítulos y ver el episodio en cuestión (por suerte, yo sí lo estoy), es imposible de seguir lo que está pasando en el capítulo, y no en un espacio de tiempo reducido, no; estoy hablando de unos quince minutos de cuarenta de metraje que van a su bola y se avanzan a la acción. Es patético, execrable, indigno y deleznable que una plataforma de contenidos de vídeo bajo demanda, en pleno 2021, ofrezca un servicio tan pobre y tan penoso como el que sigue dándonos HBO España con algunas de sus series. Sé que es una batalla perdida, porque seguirán haciendo lo que les dé la gana, pero el párrafo desahogándome no me lo quita nadie. Y ahora sí, ¿por dónde íbamos?

Creo que merece la pena abrir la review con la trama de Landon. Dije en el artículo anterior que todo hacía indicar que iban ya a juntar otra vez a la parejita por excelencia de Legacies tras un par de complicaciones en el arranque de la actual entrega. No obstante, esto ha probado de nuevo que como adivino no podría ganarme la vida, porque desde la sala de guionistas han decidido mantenerlos separados más tiempo, y lo cierto es que me alegro. 

Este episodio, en líneas generales, podríamos resumirlo con la premisa de que ha servido para que varios personajes inicien su propio camino individual hacia una nueva fase de sí mismos. Me ha quedado un poco mantra raro de yoga o de Mr. Wonderful pero creo que es así. En el caso de Landon, en vez de devolverlo a la realidad de la Tierra original (sigo en mis trece con mi apuesta de una Crisis esta temporada), han optado porque se enfrentara a sus propios demonios, y a mantenerlo en un mundo prisión, alejado de todo y todos los que quiere. Antes, nos han ofrecido unas cuantas escenas bastante interesantes con el Nigromante, que ha sido devorado por Malivore y encerrado en un su propio infierno personal, la heladería donde trabajaba cuando era humano. Landon y él “colaboran” hacia el objetivo común de salir de ese sitio, pero si el Nigromante tenía que rebajarse a complacer a los humanos para liberarse de las cadenas que le ataban a ese lugar, Landon también ha tenido que pasar por esa prueba, haciendo algo que no le habíamos visto hacer hasta ahora: moler a palos a alguien. Entiendo que no ha matado al Nigromante, o sí, no me ha quedado muy claro; pero vaya, esa faceta de Landon Kirby no la habíamos presenciado hasta ahora, y me ha gustado mucho que apuesten por explorar un lado algo más oscuro de un personaje que, hasta el momento, se había movido en la paleta de color de la variedad blanca, cuando lo habitual en esta franquicia es moverse entre el gris y el negro. Varado en el mundo prisión, veremos lo que le depara la historia en los próximos episodios, pero tengo ganas por presenciar lo que le han preparado para esta nueva fase de la temporada.

Otras que están buscando su lugar y su propio camino son las hermanas Saltzman. Josie sigue teniendo problemas con el hecho de dejar su hogar y a su familia atrás, para seguir su vida en el instituto de Mystic Falls, pero tanto el personaje de Finch como el de Ethan parece que son influencias positivas en la joven, y me gusta que Josie también tenga su propio espacio al margen de Lizzie. Ésta, por su parte, también busca a su manera olvidar que su hermana ya no está en la Escuela, y debe lidiar con ello a su manera. En este capítulo le ha servido el hecho de ayudar a que su hogar se mantenga a flote logrando que algún alumno más se apunte, pero también ha sido útil la conversación que mantiene al final con un MG que también ha tenido su episodio de romper la dinámica y buscar otra forma de afrontar su día a día: en lugar de complacer a todos, se ha puesto primero a él y a sus necesidades, y ha optado por reencontrarse a sí mismo, y luego ya, si eso, preocuparse de otros asuntos. No significa eso que deje de estar ahí para la gente que lo necesite; simplemente que primero quiere buscar su felicidad en lugar de anteponerla para que otros lo sean. Muy interesante lo que han hecho en este episodio con todos los personaje, la verdad.

Y luego, claro está, Hope tampoco ha quedado exenta de iniciar ese camino hacia una nueva versión de sí misma, dejando al margen la que era con Landon, al que cada vez tiene más claro que no podrá recuperar. Decía en la review pasada que habían supeditado mucho el desarrollo del personaje en Legacies a su relación con el chico, y que lo visto en el sexto capítulo le haya servido de catarsis para avanzar y comenzar a aceptar que, esta vez, no parece que haya forma de salvarle, me ha parecido una decisión muy buena para encauzar a la protagonista de esta historia hacia una trayectoria nueva. 

Por cierto, toda la trama del episodio me da la sensación de que está directamente vinculada a la COVID. Lo han sabido hilar bien, eso sí. Para justificar la ausencia de extras en la serie, lo han relacionado con el hecho de que los padres de todos esos alumnos se preocupan cuando se enteran de que una criatura que se dedica a alimentarse de seres sobrenaturales para subsistir amenaza la Escuela donde sus hijos estudian; y quién no se preocuparía, ¿verdad? De ahí que no regresen todos, y se justifique por el COVID, ya que me imagino que habrán tenido que reducir el grupo de la serie a los mínimos imprescindibles para reducir el riesgo de contagios. Como digo, como solución no me ha parecido mala, porque responde a una cuestión de trama; peor hubiera sido algo como que todos han muerto porque Malivore los mató, o que están en una realidad alternativa de estas que han ido creando este año, o cosas por el estilo. También tengo ganas de ver las nuevas incorporaciones a ver qué aportan a los nuevos episodios, si sirven para dar más profundidad a una serie con ya bastantes secundarios, o se quedan de meros espectadores, como aquel que dice. 

Sin avanzar demasiado en la trama global, sí que me he quedado con la impresión de que han progresado en el desarrollo de los personajes, y eso siempre es buena noticia en una serie con tantos y tan variados. A ver en el próximo por dónde van los tiros, y qué nos contarán esta vez.