Suma y sigue la temporada de Star Trek Discovery dejándonos cada semana un episodio de calidad más que notable, al igual que anteriores años la serie sigue siendo un gustazo de ver en cada capítulo. Llevamos varias semanas con la tripulación descubriendo este nuevo mundo del futuro y todas esas interacciones empiezan a tener sus repercusiones.

El escenario es simple, la Discovery va al planeta natal de Booker, pero es todo una trampa para que Osyraa se haga con el fugitivo un fugitivo al que da cobijo la nave … Pero ¿Quién Osyraa y quién es el fugitivo? Si recordáis el episodio de Scavengers, junto a Booker, Michael y Philippa rescataron a un buen puñado de esclavos y acabaron con la tiranía que había en el planeta; pues bien, Ryn es uno de los esclavos y Osyraa es la que mandaba en el planeta.

¿No es un movimiento un poco excesivo el Osyraa solo por una persona? Bien, es que resulta que Ryn sabe cosas, cosas que el cinturón esmeralda (la facción a la que pertenece a Osyraa y que dedica a esclavizar planetas) no le conviene que sean públicas, como es que les empieza a escasear del Dilitio. De todos modos, dada la precaria situación de la Federación a la Discovery no le interesa entrar en una guerra abierta con el cinturón esmeralda, ya que parece que este grupo dispone de una gran poder en el futuro y que va más allá de la propia Osyraa.

De primeras la Discovery no tiene intención alguna de entregar al refugiado a pesar de que él no confíe en la Federación, aunque el plan que tengan los enemigos de rigor sea el utilizar a Michael y Booker como monedas de cambio, ya que ambos han caído en la trampa orquestada por el hermano de este último, quien básicamente está siendo chantajeado por Osyraa con un simple “O me los entradas o destruyo el planeta”.

Tras un sincera discusión a puñetazos hacen entrar al hermano de Booker en razón mientras que la Discovery utiliza la nave de Booker, la cual no está registrada como nave de la Federación para repeler el ataque de Osyraa y forzar su huida. Puede que el plan no sea del todo malo, pero es obvio que va a haber repercusiones por parte del cinturón esmeralda y que la situación de la Discovery dentro de la propia Federación se va a ver afectada por todo lo ocurrido.

Aunque toda la parte relacionada con el planeta de Booker y Osyraa ha sido el centro del episodio, no es lo único que se ha tratado, pues vamos viendo como el tema de las visiones de Philippa se va complicando y que la propia tripulación es consciente de que a la Terrana la ocurre algo. Debo reconocer que en lo personal la trama de Philippa es la que más incertidumbre me genera, sobre todo por tener la sensación de que puente ser el gran game change de cara al final de temporada.

Dentro de los catalogados “episodios de acción” que ha tenido Star Trek Discovery hasta la fecha no diría que ha sido de los mejores, pero me gusta mucho que se vayan viendo los frutos de la presencia de la Discovery en el futuro en la temporada y que el impacto que están generando sea algo más que una trama de un episodio.