Creo que el episodio ha sido muy bueno, bebiendo del estilo clásico de The 100, hemos tenido dos tramas muy relevantes, dos asuntos que ponían en peligro la supervivencia de los personajes.Y ambos argumentos se han desarrollado con muy buen ritmo, acción, elementos sorpresa y situaciones determinantes que harán que las cosas no vuelvan a ser como han sido siempre.

Recapitulemos: para empezar tenemos un buen elemento que se añade a la trama serializada, un buen elemento basado en una buena trama independiente de este episodio. La trama independiente es la del reactor, una idea que ha funcionado muy bien y que ha cambiado a Raven (hablaremos de eso después) y el nuevo elemento es una nueva enemiga, Niki, una mujer asesina y ladrona de bancos que ha sido despojada de su amante de forma cruel, en base a las mentiras de Raven. Esta venganza de uno de los reclusos del Eligium, nos une también con temporadas anteriores y hace que la última temporada no verse sólo sobre Sanctum.

Por si todo esto fuera poco, gracias a una decisión personal y no meditada de Gaia, wonkru sabe que Madi ha sido despojada de La Llama y creen que no hay ningún comandante vivo y que jamás lo habrá; tristemente sí que hay un comandante vivo y consciente, ya que Sheidheda está presente en el cuerpo de Russell y ha tomado en control sobre el original, siendo ahora mismo el líder de los creyentes, que creen que el Original es quien les habla por esa boca. Además de ser el líder de los creyentes, es lo más parecido a un portador de la LLama que tienen en Sanctum, pudiendo el villano convertirse también en el líder de wonkru si así lo quisiera… aunque quizás sea complicada de explicar esa dualidad, es altamente probable que el tipo lo consiga. Al fin y al cabo ha conseguido librarse de la pira, convertirse en un mártir y que uno de los suyos muera linchado en sacrificio por la fe.

Creo que estoy de acuerdo con que Sheidheda sea el villano de la temporada final, el comandante oscuro tiene reminiscencias de los inicios de la serie y dentro del cuerpo de Russell casa de forma excelente con la última temporada. Quizás sea un villano que dure pocos episodios, al estilo de The 100, pues recordemos que esta serie ha sido capaz de crear tramas complejísimas y geniales para resolverlas en un arco de cinco o seis episodios, dejando al espectador siempre con ganas de más.

La explosión de reactor amenaza a todas las vidas de Sanctum, así que Raven se convierte en Clarke y arriesga la vida de su amigo Murphy y de su amiga Emori y directamente miente de forma cruel y expone a la muerte a quienes no le importan, personas que efectivamente terminan muriendo. No es así como se ha comportado Raven a lo largo de estos años, era mucho más noble, era incluso buena, no es esta la mujer que conocemos, pero parece que los guionistas quieren convertir a Clarke en una política diplomática y el puesto de wanheda queda vacante, así que Raven actúa como hubiera actuado Clarke y prima el bien mayor mandando, disponiendo y decidiendo por voluntad por propia sobre la vida de todos los demás. No termino de ver claro este cambio en la personalidad de Raven, pero ya lo analizaremos en los próximos episodios si el personaje sigue por este camino y no ha sido sólo una cosa puntual.

Quizás la dinámica de la temporada sea la de mostrar un episodios en cada lado, hasta que los personajes se unan no sabemos cuándo. Tampoco sabemos si la trama de Sanctum es relevante a efectos de la Anomalia o si todo esto pasará a ser secundario cuando Ictavia, Charmaine, Echo y Hope regresen con o sin Bellamy. Y por supuesto, lo que me sigue molestando es la ausencia de Bellamy. No entiendo cómo pueden ofrecernos una despedida digna de esta serie escondiendo a uno de sus protagonistas.

PD: Podéis ver en nuestro canal de Youtube el programa que le dedicamos a la serie tras su final.