Un episodio que no ha sido brillante, pero que ha tenido un buen número de grandes momentos. Rick continúa venciendo a sus demonios mientras que Morgan sucumbe ante sus fantasmas y por fin, por un vez, Carol salva a un niño.

El fundido en negro y el sonido de los gritos de los chatarreros masacrados por los salvadores me han parecido una manera magnífica de comenzar el episodio. Pero la trama de Jadis y Negan ha sido tan rara que no sé muy bien qué pensar.

La habitación de carácter minimalista de Jadis me ha encantado. Tenemos un contenedor que por fuera es…pues un contenedor rodeado de basura situado en un vertedero y por dentro es una monísima solución habitacional a más puro estilo del ikea. Por alguna razón, Jadis hace la maleta y planea algo que la alejará de esa habitación, pero no sabemos de qué se trata. No tiene sentido que Jadis deje a Negan junto a las armas, las fotografías y la bengala, sobre todo si para ella era de vital importancia que los del helicóptero la vieran. Tampoco sabemos por qué tenía preparada una maleta, ni si conoce a las personas del helicóptero. De hecho, no tengo ni idea de nada de lo que ha ocurrido en el vertedero. A simple vista parece que Jadis quería mantener vivo a Negan durante el tiempo suficiente para ver a Lucille arder. Pero no tiene sentido que se marche cuando suena la alarma, acerque un walker-carro a su prisionero y luego se desespere porque el helicóptero no la rescata. Nada tiene sentido.

La trama de estos dos personajes ha tenido sus momentos, como ver a Negan abriendo el corazón y hablando abiertamente de su mujer, pocas palabras pero más profundas que las que compartió con Gabriel al comienzo de la temporada. Tampoco me disgusta ver a Negan disculpándose ante Jadis, está bien que asuma la responsabilidad por los actos de Simon. Tengo ganas de verlo junto a Simon, sobre todo ahora que hemos visto como Negan recoge a alguien, supongo que alguien que sabe de la traición de Dwight. Después regresa a casa y dice que quiere mantener su llegada en secreto, supongo que para vengarse de los traidores. Por lo tanto la semana que viene veremos el final de Simon y quizás también el de Dwight.

El camino recorrido por Tara desde “quiero matar a Dwight para vengar a mi novia” al actual “Dwight es mi amigo porque me disparó con una flecha sin infectar” es un recorrido que me hubiera encantado ver, pero que no he visto, porque la serie no lo ha mostrado. La mujer ha pasado de un extremo a otro tras el episodio del pantano. Todo lo que media entre la rabia más absoluta y la compresión es un universo que no nos han enseñado. No me parecía coherente que Tara no mostrase ninguna simpatía hacía los tipos que luchaban de lado de los salvadores cuando ella misma luchó junto al Gobernador y me alegra que cambiase su opinión. Pero aunque su postura actual es mucho más creíble, no han mostrado el viaje del personaje desde una opinión a la otra.

Los restos de salvadores supervivientes secuestran a Rick y a Morgan y comienza la mejor parte del episodio. Rick hace lo correcto al prometer a esas personas la oferta de ser parte de una comunidad en la que es posible la paz. Ellos hacen lo correcto al desconfiar. Ya han visto como es la vida en Hilltop, pero también han visto muchísimo horror y mentiras a lo largo de sus experiencias en el Apocalipsis, así que es natural que unos desconfíen y otros se planteen aceptar el trato. Creo que la escena ha estado bien escrita y bien desarrollada. La disyuntiva de esos hombres que no saben si creer en la palabra de Rick es magnífica. Se enfrentan a la promesa de empezar desde cero en Hilltop junto al miedo de que no exista ningún trato y además, la amenaza de la horda que marcha contra ellos. Todo está repleto de tensión, que sube de nivel cuando efectivamente entra la horda y los hombres deben aniquilar a los walkers, para que esto sea más fácil sueltan a Rick y a Morgan, posiblemente porque están soñando con ser aceptados en Hilltop. Se defienden de los zombies y de repente… una mirada de Rick a Morgan. Una mirada. Y se desata la violencia contra los salvadores. Es absolutamente alucinante ver a Rick clavar el hacha en el salvador que prometió salvar. Creo que más de un espectador se ha quedado gélido con la reacción de “los buenos”. Al menos yo no me lo esperaba en absoluto. Morgan está completamente loco, así que tiene cierta justificación, pero Rick está cuerdo y aunque le duela la perdida de su hijo, no tiene razones para comportarse como un auténtico monstruo.

No son menos monstruosos Daryl y Rosita hablando tranquilamente de cargarse a Eugene, un hombre a quien consideraban un amigo no hace tanto tiempo. Tengo curiosidad por saber si Eugene será perdonado o al menos considerado como un elemento útil para la supervivencia de la comunidad.

La búsqueda de Henry y las conversaciones que suscita aportan más fondo a la locura de Morgan, el carácter extraordinario del rey Ezekiel y nos muestran un poco más de la Carol que conocemos y nos encanta. Incluso he sentido cierta reminiscencia de aquél momento en que era la hija de Carol quien estaba extraviada. Creo que aunque la subtrama no tenía mucho jugo, porque tampoco nos importa Henry, lo cierto es que ha sentado muy bien darle a Carol una victoria y a Ezekiel un poco de esperanza.