Tengo que decir que estas tres semanas sin Arrow se me han hecho muy largas. La serie se encuentra en un gran estado de forma este curso y tener tantos parones en tan poco tiempo creo que le corta un poco el ritmo. No obstante, su regreso esta semana ha vuelto a dejarnos un buen episodio, y que encima sirve para despedir a uno de los personajes más queridos de la serie, y no despedirla en el mal sentido.

Normalmente, en una serie con las características que tiene Arrow, cuando hablamos de despedir a un personaje, lo primero que piensa el lector o el espectador dependiendo del caso es “Fulanito/a va a palmar“. Está en la naturaleza de las series con tanta violencia, drama y muerte, y desde que hizo acto de presencia Game of Thrones en nuestras pantallas (si habíais leído la saga antes ya estabais curados en salud) creo que todos hemos interiorizado que hasta en las series más tranquilas, cuando un personaje se va, suele ser con los dos pies por delante. Curiosamente no fue el caso de Roy, que regresó en el capítulo anterior, y por suerte no ha sido el de Thea, que nos deja para embarcarse en su propia aventura, y me alegro de que no haya muerto. Empieza a cansarme el hecho de que para salir de una serie el personaje tenga que morir; comprendo que narrativamente para justificar la salida de alguien relevante se deba cortar de raíz su presencia en la ficción, como fue el caso de Laurel, que tras varias temporadas navegando sin rumbo fijo, por fin asumió el rol de Black Canary, y justo entonces, los responsables de la serie la mataron, porque hacer que un personaje de esa relevancia abandonara Arrow en ese punto no tenía sentido. Con Thea no era necesario porque, siendo sinceros, desde que dejara de ser Speedy no había tenido un rumbo claro. Ayudó a Oliver en la temporada pasada en la alcaldía pero siempre estaba en un segundo plano, algo que no era muy habitual en su personaje, sobre todo después de ganar importancia progresivamente en la ficción; y esta temporada quedó en un tercer plano tras los acontecimientos de Lian Yu, que la postraron en una cama de hospital durante meses. Su regreso no había tenido un impacto notable en estos últimos episodios, hasta que apareció Roy en el anterior.

Ya en su día hablamos de la importancia de Thea dentro de Arrow, y cómo fue convirtiéndose en uno de los mejores personajes que habían construido durante sus primeros años de vida en The CW, y me ha gustado especialmente que le hayan dedicado un capítulo entero para despedirla. Aprecio de verdad las series que se toman su tiempo para decirle adiós a un personaje querido o importante, como el caso de Legends of Tomorrow este curso cuando tocó despedir a uno de los tripulantes de la Waverider. Thea no podía irse de cualquier forma, y hoy ha acaparado toda la atención del episodio y ha sido aquel personaje que todos recordamos cuando estaba en plena efervescencia con su rol en la serie, capaz de hacer que Oliver casi fuera un secundario en su propia ficción. No estamos hablando de un personaje cualquiera, es la hermana del protagonista y uno de sus mayores apoyos tras su regreso de Lian Yu, hace ya tanto tiempo. Hemos recordado quizá uno de los momentos más importantes de su trayectoria en la serie, allá por el final de la gran segunda temporada, cuando decidió subirse al coche con Malcolm y embarcarse en su viaje hacia Speedy, queriendo ser algo más que la joven indefensa que se ve superada por todo lo que sucede a su alrededor, y consiguiéndolo tiempo después, a pesar de las tretas de su padre biológico. Thea Queen deja Arrow junto a Roy y Nyssa, y nos queda la duda de si la volveremos a ver. Teniendo en cuenta que nos movemos en un multiverso en el que hay resurrecciones, dopplegangers, apariciones y, por supuesto, regresos normales y corrientes, estoy convencido de que en algún punto del futuro volverá a hacer acto de presencia.

Sobre el episodio, hemos empezado con una fiesta de despedida de Thea y Roy, pero al final hemos tenido una aventura casi diría más propia de Indiana Jones (muy bien las referencias) que de Arrow. Y es que hemos conocido a la organización que da nombre al capítulo, el Gremio de Thanatos, organización que fundó Malcolm Merlyn poco antes de morir y que buscaba ocupar el hueco que dejó la Liga de Asesinos cuando fue disuelta años atrás. Este gremio busca a Thea porque es la clave para encontrar un artefacto valioso y antiguo, y el secreto que éste guarda. Durante el hallazgo de ese cofre que guardaba el mapa que descifran al final del capítulo, hemos tenido muchas conversaciones interesantes, algunas de simple alivio cómico, como la bigamia de Oliver, ya que si recordáis, el matrimonio que contrajo con Nyssa al Ghul en la tercera temporada todavía está vigente (aunque queda resuelta en la conclusión del capítulo); y otras más profundas entre los hermanos Queen, entre otras cosas acerca del motivo por el cual Oliver no cede ante las peticiones de John de que vuelva a ponerse el traje de Green Arrow. Ya me he pronunciado al respecto antes, y el propio Oliver lo deja claro por si había alguien que dudara (no creo): le gusta ser el justiciero de Star City, y punto. Añado yo algo de mi repertorio: no hay Green Arrow sin Oliver Queen, así que, por favor, zanjad el asunto rápido y quitadle a Diggle esa idea de la cabeza.

Tras varios encontronazos con el Gremio, el Team Arrow sale victorioso y el mapa finalmente revela que hay más Fosos de Lázaros, además del que conocimos en Nanda Parbat, lo que parece que se ha convertido en la misión de Thea y Nyssa, encontrarlos y destruirlos como hiciera la hija de Ra’s temporadas atrás. Como comentaba antes, me alegro de la forma en la que Thea abandona la serie, queriendo corregir los errores de su padre y buscando como consecuencia su propio camino.

Ah, y con respecto a otros miembros de la serie, el relleno de esta semana ha corrido a cargo de Curtis y Dinah, que han descubierto algo que los espectadores ya sabíamos desde hace varios episodios pero que los personajes de la serie no, y es que en la comisaría de policía de Star City, está corrupto hasta el apuntador. Minutos de relleno que, al menos, ponen al día a los personajes sobre lo que está pasando en la ciudad, y supongo que veremos más en profundidad en próximos episodios.

La marcha de Thea ha monopolizado (como no podía ser de otra forma) el episodio de esta semana, por lo que imagino que en la próxima ya volveremos al hilo principal ya pensando en la recta final de la temporada. Hasta la semana que viene.