Lo Mejor de 2017: Dramas
La entrega reina del especial de cada año, las mejores series de drama. Aquí siempre hay nivel a rebosar, aunque últimamente se haya diferenciado notablemente el nivel de las producciones de cable con respecto a las de network. No obstante, nuestros colaboradores han seleccionado las ocho series (cuatro de network y cuatro de cable) que para ellos han sido las mejores de este 2017. No dudéis en dejarnos vuestras impresiones en los comentarios o en nuestras redes si consideráis que falta alguna… o que no pinta nada alguna de las elegidas. Aquí tenéis la selección.
Los mejores dramas a juicio de Víctor
Mejor drama en network: Line of Duty (BBC Two)
En muchas ocasiones se dice que cierto tipo de películas son tan excelentes como excelente sea su antagonista. Esto se puede aplicar perfectamente al mundo de las series, y en este caso la serie que he elegido como la mejor de 2017 puede presumir de tener de los mejores y más inteligentes antagonistas que se pueden disfrutar en el panorama actual televisivo.
Esta serie británica, creada por Jed Mercurio para BBC, y protagonizada por Vicky McClure, Martin Compston y Adrian Dunbar, nos cuenta los casos en el que se ve inmersa la unidad AC-12, una especie de asuntos internos de la policía británica, que se enfrenta a la corrupción de sus propios compañeros.
En esta cuarta temporada emitida en 2017, ese papel antagonista recaerá en Thandie Newton, que además ya venía con el tirón de su participación en Westworld y su gran papel en ésta, lo que hacía presagiar que lo que veríamos estaría en buenas manos, como así fue. El pulso que mantiene con la unidad AC-12 llega a rozar niveles de epicidad poco vistas, y la forma de no polarizar personajes, donde nunca son estrictamente buenos o malos, si no que mantienen una graduación de valores que consigue que logres empatizar con ellos; esto hace de esta serie alcanzar unas cotas de calidad que aún no entiendo como más gente no la está viendo.
Mejor drama en cable: The Leftovers (HBO)
Serie inclasificable como ninguna, más de una vez me han pedido opinión para verla y me cuesta pasar del “tú sólo empiézala”, ya que ni contando la sinopsis llegarás a describir de lo que esta serie trata. Hoy en día es difícil encontrar una serie con unas opiniones tan polarizadas, por suerte yo estoy del lado de los que han sido atrapados por ese extraño camino que recorren los personajes.
Si hay algo de lo que esta serie puede presumir, pero bien, es de sus personajes. Tanto del dúo protagonista, con unos inconmensurables Justin Theroux y Carrie Coon, como con secundarios del nivel de Amy Brenneman y Christopher Eccleston, que tienen más recorrido que algunos protagonistas de otras series. Sin olvidar a Liv Tyler, Ann Dowd, Scott Glenn, Regina King, Kevin Carroll… Cada uno de ellos, independientemente de su aportación a la serie, ha ayudado a construir una serie muy rica en matices.
En su tercera, y última temporada, hemos podido disfrutar a lo grande del hipnótico viaje hacia lo desconocido. Como cada año, han cambiado el trasfondo de la serie pero el espíritu ha permanecido intacto, totalmente reconocible, e intentando expresar lo que se esconde en el fondo del alma de los protagonistas, llevándonos a sentir lo que ellos han sentido, hacernos partícipes de su viaje y junto a ellos, llegar a un final del trayecto que a muchos nos ha parecido el perfecto cierre que esperábamos para esta serie.
Los mejores dramas a juicio de Iván
Mejor drama en network: Peaky Blinders (BBC Two)
Me ha costado mucho no hablar de Line of Duty, pues habría sido muy bizarro repetir mis ganadores en drama del año pasado en su totalidad, pero aunque la serie de Jed Mercurio ha hecho méritos más que de sobra para volver a aparecer entre mis ganadores, debo reconocer que hay una serie británica que ha conseguido algo mucho más complicado: reconquistarme.
Quienes nos leáis las secciones semanales sabréis de sobra que la tercera temporada de Peaky Blinders fue un puñal en mi corazón, que se clavó tan profundamente que mi hype con la serie se redujo a unos niveles drásticos, por lo que haber podido disfrutar de la que para mi ha sido su mejor temporada, ha significado más que una mejoría en la serie, ha sido la propia ficción pidiéndome perdón y lo siento, pero no soy de piedra.
A niveles de producción y ambientación Peaky Blinders ha mantenido el altísimo nivel que tuvo siempre, pero recuperar las tramas rápidas e interesantes de antaño y apoyarla en una sucesión de personajes que cada uno era mejor que el anterior, es un triunfo en toda regla. Seis episodios que saben a poco y que contra todo pronóstico me hacen volver a adorar la serie de la BBC Two como hace dos años.
Mejor drama en cable: Halt and Catch Fire (AMC)
Sinceramente no es que me haga especial ilusión repetir por tercer año consecutivo la misma serie en el mismo premio, pero siendo justos quedaría muy artificial por mi parte no hablar personalmente de la que considero de largo la mejor serie dramática del último curso, pues tanto los lectores habituales al blog como quienes solamente me conocen por Twitter o en persona, saben que para mí Halt and Catch Fire está muchos peldaños por encima de cualquier cosa hecha en televisión en los últimos años.
Ya he hablado de sus personajes, de su trama, de su evolución como serie; habré hablado una infinidad de veces sobre la serie en cuestión en esta misma web, pero creo que todavía no he escrito sobre lo que ha sido esta temporada final en sí. Halt and Catch Fire se ha despedido con una temporada a la altura de lo que ha sido la serie en su global, marcándose la despedida perfecta y siendo el culmen a la mejor evolución de personajes desde Six Feet Under (oh wait, esto juraría que ya he dicho); se ha marchado siendo una serie única que ha logrado que amemos y odiemos a sus cuatro protagonistas a pesar de los incontables fallos que les hemos visto tener, se ha ido siendo una serie a la cual si llegas a su final es imposible no adorar.
No me gusta repetir premios, sobre todo siendo tantas personas en este blog; sin embargo creo que no hay mejor forma de darle la despedida final admitiendo que al menos para mí, ésta ha sido una de las mejores series de lo que llevamos de década y desde luego el mejor drama de cable del año.
Los mejores dramas a juicio de María
Mejor drama en network: This Is Us (NBC)
Adoro esta serie, porque consigue que el espectador se enfrente a sentimientos complejos a través de unos personajes con los que es muy sencillo verse identificado, de manera que, de algún modo, la serie se convierte en un espejo de nuestra realidad para mostrarnos nuestros miedos y fantasmas con una naturalidad pasmosa. Durante la primera temporada terminé llorando después de cada episodio, no porque la serie sea especialmente triste ni porque ahonde en nuestros traumas, sino porque despierta la emotividad que resulta de cosas muy reales y cotidianas, pero ante las que no podemos llorar en nuestro día a día con la libertad con la que lo hacemos ante una serie de televisión. This Is Us sirve como excusa para mirar a los ojos algunas realidades que estamos demasiado ocupados para observar, pese a que son las cosas más importantes de la vida.
Lo que hace mágica a esta serie es que no sigue una linealidad temporal ni argumental, de manera que sólo vemos piezas y retazos de historia de las que vamos entendiendo la correlación mediante grandes revelaciones y sorpresas al final de cada episodio. Vemos a los personajes desenvolverse en el presente, sin saber muy bien cómo han llegado allí y qué les ocurrió en el pasado. Desde el primer momento supimos que Jack estaba muerto y que Will iba a morir y de algún modo extraño vivimos esas dos perdidas de formas diferentes porque la particular forma de contar la historia los mantiene vivos.
Las interpretaciones son maravillosas, especialmente Sterling K. Brown, aunque también Milo Ventimiglia y Ron Cephas Jones nos enamoran, incluso Chris Sullivan (Toby) tiene sus momentos … de hecho, todos los chicos están sensacionales salvo el pobre Justin Hartley que no es tan buen actor como los otros y tiene a un personaje, Kevin, que no es ni remotamente tan interesante como los demás. Las mujeres son todas increíbles, me encanta Chrissy Metz porque es imposible no amarla y creo que Susan Kelechi Watson está impecable. Aunque posiblemente el papel más complicado es el de Mandy Moore, que se interpreta a si misma en, al menos, cuatro momentos históricos de su vida y que mediante una buena caracerización y una magistral interpretación nos dibuja a una enamorada llena de ilusión, una madre llena de miedo, una cantante llena de sueños y una mujer que ha ido perdiendo ilusiones, dejando a sus sueños atrás, sumando perdidas y dolor mientras se esfuerza en crecer. Y todo esto es precioso.
Mejor drama en cable: The Handmaid’s Tale (HULU)
Si This Is Us nos hace amar y comprender la imperfección del ser humano, recuperar la confianza en las personas y mirar esperanzados al futuro, The Handmaid’s Tale consigue todo lo contrario y a base de episodios cada cual más devastador, nos convence de que la humanidad lleva perdida ya un tiempo y que estamos condenados a sucumbir en nuestros errores y perdernos del todo, para siempre. En parte me sabe mal destacar un producto tan descorazonador como este, porque mientras algunos espectadores sólo han visto una ficción, yo he visto una mirada a un futuro no tan imposible como otras distopías, y por eso mismo, mucho más aterrador.
La lectura más moral nos debería hacer reflexionar sobre cómo ignoramos nuestro entorno y no prestamos atención al deterioro de determinados aspectos sociales. Cada episodio hace que el espectador recapacite y lleve su mirada a espacios que normalmente permanecen ocultos y esto, usar la televisión como medio para que los espectadores prueben diferentes perspectivas y usen el cerebro es una maravilla, por atrevido y por poco usual. La apuesta de Hulu por esta historia de Margaret Atwood es de una valentía enorme y eso merece ser tenido en cuenta.
También ha de ser valorado el aspecto más técnico de la producción, que es impecable; la voz narrativa, que es a la vez introspectiva y globalizadora; el trabajo interpretativo de todos los involucrados, donde especialmente destaca Elisabeth Moss con un desempeño absolutamente magistral, pero no sólo ella brillante, Alexis Bledel, Samira Wiley y sobre todo Ann Dowd también nos cautivan con interpretaciones sublimes.
Los mejores dramas a juicio de Daniel
Mejor drama en network: El Ministerio del Tiempo (TVE)
Qué difícil lo ha tenido la ficción de Javier Olivares este año. De entrada, la tardía renovación de RTVE para una tercera temporada trastocó los planes del equipo, unido a la marcha de Rodolfo Sancho antes siquiera del inicio de la misma, por lo que ya de entrada, el plan de Olivares para la estructura de la nueva entrega cambió y se tuvo que adaptar a las vicisitudes que se iba encontrando por el camino. A eso le podríamos añadir la marcha de otro de los miembros de la patrulla a mitad de entrega, pero tras finalizar la misma, sinceramente considero que no ha sido un cambio tan traumático.
Con el estilo al que nos ha habituado el creador español durante estas tres temporadas de vida de la ficción, hemos vuelto a tener un gran año mientras los protagonistas viajan a diferentes épocas de la historia española, conociendo a más personajes destacados, y cumpliendo una función didáctica con cada capítulo que pasa. Con todo lo señalado anteriormente, Olivares ha conformado una tercera temporada con un nivel que no decae con respecto al de las anteriores, y que nos ha dejado momentos a la altura de los mejores de la serie, con todos los personajes teniendo la oportunidad de lucirse durante la entrega. Ahora mismo, creo que no tenemos una ficción mejor en nuestro país, y la solidez y excelencia de esta temporada lo demuestra. Con todo a lo que se ha enfrentado Olivares y el resto de responsables de la serie durante este año, la ficción no ha perdido un ápice de calidad y nos ha dejado un entretenimiento más que digno.
Ahora solo queda esperar qué se les ocurrirá hacer a los dirigentes de RTVE con ella. Tras ser maltratada y vilipendiada una semana sí, otra también por parte de la misma, me sorprendería (gratamente) que la renovaran. Es triste que nuestra cadena pública no cuide mejor el diamante en bruto que es El Ministerio del Tiempo, así como el resto de sus ficciones. Algunas veces pienso que a alguien le molesta esta serie, y por eso la menosprecian con horarios lamentables y reprogramaciones salidas de la nada. Si no continua su andadura, solo puedo decir que nos quiten lo bailao.
Mejor drama en cable: Game of Thrones (HBO)
Hablé largo y tendido de la séptima temporada de Game of Thrones en su momento, además de que pudisteis acceder a las reviews semanales que mi compañera María nos dejaba en este blog, y en esta selección de mejores series del año, no podía faltar una de las más importantes de estos últimos años, si no la que más. Y eso a pesar de que haya tenido este año opiniones más polarizadas que nunca; los hay que la han amado, y los hay que han encontrado más fallos que nunca… fallos que siempre han estado ahí, y parece que no querían ver.
La espectacularidad que ha alcanzado Game of Thrones dudo seriamente que pueda volver a ser alcanzada por alguna producción en un tiempo, o quizá no lo sea nunca. Puede que este despliegue de medios haya supuesto que las tramas hayan perdido nivel, pero si de algo me quejaba yo otras temporadas (y parecía ser el bicho raro por criticarlo) era precisamente que el nivel había caído en algunas de las historias de Poniente, y por eso he agradecido enormemente que hayan ido al grano desde el minuto 1, y no hayan escatimado en hacerlo todo de la forma más espectacular posible, aunque haya habido fallos en el proceso. Pero realmente, una vez que analizas globalmente esta séptima y penúltima entrega, creo que todos (o la mayoría) encontraremos más puntos positivos que negativos, y yo es algo que no sentía desde hacía tiempo.
Acepté tiempo atrás que si quería disfrutar (más todavía) como un enano con Game of Thrones, y sobre todo sabiendo que esto se acaba, tenía que tratar de buscar con más ahínco los puntos positivos que los negativos que pudiera tener. Y no sé vosotros, pero si me ofrecen un espectáculo visual como el del 7×04, yo poco más puedo pedir. Será que yo no pido mucho, o que de repente el resto se han vuelto exigentes con la serie de HBO. Sea como fuere, este 2017 hemos tenido una gran entrega de este gigante, y como penúltimo tramo de serie ha cumplido con creces.