Review Legends of Tomorrow: Aruba-Con
La que fue la mejor serie del Arrowverse la temporada pasada regresó anoche a Estados Unidos con su tercera entrega, en la que tiene el difícil reto de igualar lo visto en años anteriores, por lo que la tarea no se plantea sencilla. Este curso, vamos a seguir en CasaSpammer las andanzas del Team Legends con nuestras reviews semanales, que redactará un servidor, además de las de la sexta temporada de Arrow, por lo que me tendréis en dos series diferentes de DC esta temporada. Sin más dilación, repasemos lo sucedido en este 3×01, Aruba-Con.
Decía en el párrafo anterior que la nueva entrega de Legends of Tomorrow buscará estar a la altura de sus predecesoras, y eso no es nada fácil, ya que el nivel de excelencia mostrado en la segunda mitad de temporada es difícil que se repita; si lo consiguieran, creo que todos estaríamos muy sorprendidos, pero hay que pedirle a la serie que trate de mantener el nivel y ofrecernos un entretenimiento digno de lo visto años atrás. Además, deben superar su propio Rubicón que es no venirse abajo en la tercera temporada como hicieron hace unos años Arrow y el curso anterior The Flash. Ni la serie de Oliver Queen ni la de Barry Allen fueron capaces de ofrecer terceras partes a la altura de lo visto en sus dos primeras entregas, por lo que si Legends of Tomorrow cumple las expectativas y nos deja una tercera notable cuanto menos, creo que se consolidaría (si no lo está ya) como la mejor serie que el Arrowverse nos ha ofrecido desde sus inicios.
Pero seamos sinceros, esta Season Premiere no ha sido brillante. Tampoco era necesario, pero confío en que reconduzcan la situación más pronto que tarde. Si lo comparamos con el arranque de la temporada anterior, el 2×01 y 2×02 fueron bastante intensos y ya nos adelantaban un nivel que llegaría después del parón invernal, ya que precisamente hasta el crossover, lo cierto es que los episodios con tramas sueltas no terminaron de convencerme demasiado, a pesar de ir dejándonos algún que otro momento destacado. Este Aruba-Con es una puesta al día tras el impactante final de segunda temporada y se acerca más a un capítulo procedimental que a uno relacionado con la trama de la tercera entrega, que todavía desconocemos.
Curiosamente, esperaba un mayor hincapié en la imagen de cierre del curso pasado, con ese dinosaurio en mitad de las calles de Los Ángeles y un Big Ben decorando su paisaje. Recordad que para acabar con la Legion of Doom, el Team Legends tuvo que tomar una medida extrema: viajar a un punto temporal en el que ellos ya habían estado y coincidir con versiones anteriores a las suyas, lo que provocó una paradoja temporal catastrófica alterando el curso de la historia. Pero, para mi sorpresa, lo han resuelto en el cold opening. Con la intervención de Rip Hunter justo antes de los títulos, se ha dado carpetazo al cataclismo creado por ellos mismos, y al volver a la acción del episodio, nos topamos con un salto temporal de seis meses que parece que comparten todas las series de DC en la cadena (Supergirl y The Flash lo han tenido, imagino que Arrow sucederá igual), en el que vemos a los miembros del equipo desperdigados, cada uno a su rollo y el Team Legends disuelto. Precisamente el Rip Hunter que vimos partir de la Waverider y darle el mando definitivo a Sara ha sido uno de los puntos más sorprendentes del episodio, ya que en todo momento ha actuado renegando de los que un día fueron sus compañeros y su familia, y poniendo trabas a todo lo que hacían. Comprendo que, tal y como dice él, han pasado cinco años desde el momento en el que se despide de la capitana hasta que llegan ellos a Los Ángeles, pero debería saber que el Team Legends es una de las bazas más importantes que tiene la historia para afrontar sus peligros… aunque en más de una ocasión la caguen en el proceso. Con la creación de esa Oficina Temporal, vemos a Rip más burócrata que nunca, dirigiendo toda una agencia de funcionarios que van enmendando los desperfectos generados por su anterior equipo. No sé vosotros, pero eso de una entidad que se encarga de ir corrigiendo errores por distintos períodos temporales me suena bastante al Ministerio del Tiempo… que no me lea Olivares o les planta demanda a los amigos de The CW. Supongo que tanto a Rip como a esta agencia los volveremos a ver durante la temporada, además de que ya nos han dejado caer que hay algo que ha despertado tras la Season Finale de la segunda, ese tal Mallus. Veremos si se trata del enemigo de este año, o uno de ellos.
¿Y dónde están nuestros héroes? Bueno, cada uno metido a lo suyo, y sobrellevando a su manera la disolución del Team Legends. Que Mick esté en Aruba tomando el sol me parece comprensible; lo mismo diría de Ray (aunque que desarrolle apps para ligar me resulta un poco degradante para él); Nate haciendo sus pinitos en Central City tampoco me disgustaba demasiado (me ha gustado la aparición de Kid Flash); al igual que Jax yendo a la universidad y Martin quedándose con su familia. La que más me ha llamado la atención ha sido Sara trabajando en unos grandes almacenes, convirtiendo en realidad el sueño de muchos empleados de acabar con su jefe tocapelotas. Por suerte, esto dura más bien poco y se encauza la situación de nuevo a la acción, que no es ni más ni menos que detener a Julio César en Aruba.
Por cierto, un detalle sobre el actor que ha dado vida al famoso romano: se llama Simon Merrells e interpretó a Crassus en la finalizada Spartacus, haciendo un formidable papel. Se ve que a este señor le han visto cara de romano y pensaron que sería una buena elección para este episodio también. En cualquier caso, pronto el equipo recupera una Waverider que ha visto mejores días y se dirigen a Aruba para capturar a César y devolverle a su época. Divertida escena con Sara dejando por los suelos al romano mientras Ray y Nate comentan “-Shouldn’t we help her? -It’s him I’m worried about”. Me gustan los momentos de ambos juntos, a pesar de que no son mis personajes favoritos de la serie, pero creo que se complementan bastante bien, porque son bastante patosos y pecan muchas veces de hacerse los listos, como le pasará después a Nate con Julio César.
Como decía, Nate lo echa a perder al hacer que un libro sobre historia romana caiga en manos del romano y esto provoca que, por enésima vez, la historia se vaya al garete. El intento de la Oficina Temporal de solucionar el problema acaba mal (se veía venir) y Sara y el resto tiene que salvar el día y solventar la situación nuevamente, devolviendo cada uno a su lugar. Con el permiso de Rip y los suyos, Sara y su tripulación vuelven a navegar por la historia para ir arreglando los anacronismos creados por ellos tras vencer a la Legion of Doom. Pero nos falta una integrante del anterior equipo, Amaya. La joven regresó a su hogar en Zambesi para no alterar más si cabe la línea temporal, por lo que su romance con Nate terminó. Sinceramente, estos dos no me apasionaban demasiado el curso pasado, por lo que me alegro de que los separen. Eso sí, me ha dejado sorprendido el final del episodio, que no sé qué nos ha querido dar a entender: ¿Amaya perdiendo los papeles y dejando que sus poderes la controlen? ¿O simplemente que está bien y que está defendiendo su hogar? Me inclino por la primera opción, e imagino que más pronto que tarde volverá al equipo, aunque tampoco me importaría que no lo hiciera. Veremos qué pasa con ella.
Como valoración final del episodio, diría que ha sido una Season Premiere correcta sin más, que ha vuelto a poner las fichas sobre el tablero y ha introducido levemente el que quizá sea el villano o uno de los rivales de esta temporada para el Team Legends. Momentos divertidos, un capítulo entretenido que nos trae de nuevo al equipo para afrontar una tercera entrega que esté a la altura de otros años. ¡Nos vemos la semana que viene!
A mí tampoco me ha encantado.
Pero sobre todo, me molesta la variación tan brutal que ha experimentado Rip. Una cosa es que cambie… que bueno, vale, todo el mundo cambia si vive cosas que lo hacen cambiar, pero es que Rip Hunter es a Legends lo que Harrison Wells a Flash, con la diferencia de que en la serie de Barry Allen al menos cambian al personaje explicándote que es otro personaje, mientras que Rip es un tipo distinto cada temporada y se supone que nos tenemos que creer que sigue siendo el mismo hombre.