Parece que en el apartado interpretativo tenemos a dos claros campeones veraniegos, ya que tanto Tatiana Maslany (Orphan Black) como Nikolaj Coster-Waldau (Game of Thrones) repiten por segundo mes consecutivo en el escalón más alto de nuestra competición particular. El pasado agosto destacamos sus interpretaciones en julio, en el inicio de las temporadas de sus respectivas series y ahora hablamos sobre el papel que desempeñaron en las rectas finales de la penúltima temporada de Game of Thrones y en la última (incluyendo series finale) de Orphan Black.  María nos habla de él, y Daniel de ella.

Nikolaj Coster-Waldau (Game of Thrones)

Creo que el carácter de Jaime se sustenta en dos pilares: por un lado, es un personaje marcado por su papel como Guardia Real, es ante todo un soldado y un guerrero y ahí lleva adosada la sombra del recuerdo de que en su juventud asesinó al rey vigente. La otra gran característica que forja a su personaje es la relación incestuosa con Cersei, un enamoramiento que, aún siendo entre personajes no emparentados, también tendría una naturaleza enfermiza por la manera en la que Jaime se anula a sí mismo ante la presencia de su hermana. Pero en la season finale parece que algo cambia y aunque no tenemos los suficientes datos como para afirmar que Jaime se ha cansado definitivamente de su hermana, hay algunos indicios que apuntan en esta dirección. Y eso nos encanta. Nos gusta porque la evolución que presentó el personaje junto a Brienne no puede haberse evaporado completamente en cuanto volvió a los brazos (o entre las piernas) de su hermana.  Nikolaj ha sabido captar a la perfección toda esta lucha interna entre el amor, la fidelidad a Cersei y la fidelidad a sí mismo.

En The Dragon and the Wolf Nikolaj se luce muchísimo, sobre todo en la conversación que mantiene con Cersei, aunque está impecable en todas las intervenciones que realiza en el episodio, desde su sorpresa ante el muerto que El Perro lanza a sus pies hasta su sutil enfrentamiento con La Montaña, cuando su hermana lo amenaza veladamente. El momento en el que Cersei revela que ha engañado a todos y que su plan es dejar que los muertos diezmen los demás ejércitos mientras ella se hace con los mercenarios, le muestra a Jaime el tipo de monstruo tan terrible que puede llegar a ser  …. y quizás eso haga que Jaime despierte de una vez. Para Jaime no hay duda de que la única opción posible para un soldado es marchar al norte a enfrentarse con la muerte.

The Spoils of War es, ante todo, un episodio impresionante, pero también una oportunidad de oro para ver a Jaime en su elemento natural: el campo de batalla. Además, en este episodio no sólo asistimos a un Jaime que lucha, lo vemos perdiendo a sus hombres y fracasando como soldado y eso hace que cada una de sus decisiones (incluso las más temerarias) lo dibujen como el personaje sumamente valiente y decidido que es, alguien que incluso en la humillación de la más absoluta de las derrotas es capaz de lanzarse hacia el rival … aunque lo que tenga en frente sea un dragón. Este es un episodio que parece hecho a medida para Nikolaj, un episodio hecho al servicio de Jaime, donde el actor que lo interpreta se luce en cada uno de sus gestos y logra que los espectadores veamos por sus ojos el horror que puede generar la hija de aquel rey a quien Jaime mató.

Tatiana Maslany (Orphan Black)

Tatiana Maslany es Orphan Black, y Orphan Black es Tatiana Maslany. La actriz ha demostrado durante la trayectoria de la serie que ella ha sido el pilar de la producción de BBC America, alrededor del cual se ha construido el resto de la ficción. La historia de los clones no podría haber funcionado tan bien de no ser por el brillante papel de la actriz, desconocida hasta que empezó esta serie, pero que gracias a su gran trabajo seguro que le lloverán ofertas de futuras producciones televisivas, e incluso cinematográficas. Porque si algo nos ha quedado claro a todos los espectadores de la serie es que es versátil, y domina numerosos registros.

Todo ello necesario para que el seguidor de Orphan Black no la vea vestida de formas distintas en función del personaje al que interprete, sino que vea a uno de los diferentes clones, como si fuera una actriz completamente distinta, que es lo que me sucedía a mí cuando veía la serie. Yo cuando me ponía un episodio, y aparecía uno de los muchos y diferentes clones que nos fueron introduciendo con el paso del tiempo, lo consideraba como algo único, con sus características, su personalidad, su forma de ser, y todos esos matices necesarios para poder diferenciar a unos personajes de los otros los ponía Maslany, haciendo que el universo de Orphan Black creciera al son de su interpretación. El verdadero mérito de la serie de BBC America ha sido presentarnos al resto del mundo a Tatiana, y creo que sin ella su vida durante cinco temporadas no habría sido posible, porque quizá otra actriz cargando con la mayor parte del peso de la producción no hubiera podido transmitirnos todo lo que ella ha conseguido dando vida a Sarah, Rachel, Cosima, Beth, Alison, Helena o el resto de clones, para que las viéramos como entes propios, no meras copias de una original.

La etapa final de Orphan Black se cerró, bajo mi punto de vista, de una forma más que correcta, y a pesar de que la ficción ha tenido altibajos durante sus 50 episodios emitidos, creo que siempre ha mantenido una constante que ha hecho que la serie no decayese, y ese fue el enorme trabajo de esta gran actriz como es Tatiana Maslany. Tengo muchas ganas de ver si ficha en el futuro próximo por otra ficción y qué rol desempeña, porque después de ponerse en la piel de múltiples clones, cada uno con su personalidad y esencia propia, cualquier papel se le puede quedar pequeño a Maslany.