Tras estar programada inicialmente para el 7 de julio, y ser retrasada en nuestro país por la huelga de dobladores, ayer ya se estrenó la nueva película del hombre araña, esta vez en Marvel, y os cuento qué sensaciones me dejó la cinta.

Para empezar, quisiera dejar claro que la película no sigue la estructura de las iniciales de los anteriores Spiderman, es decir, no es una presentación clásica del protagonista, ya que eso lo vimos en Civil War, que sirve para introducir a Peter Parker en el universo cinematográfico de Marvel, y en este film ya se da por sentado que lo has conocido en la tercera película del Capitán América, por lo que el comienzo no se mete en cuestiones introductorias y ya entra de lleno en la vida del joven Peter, ajustándose tras su participación en la mencionada cinta.

A partir de ahí, lo cierto es que la película está monopolizada prácticamente por situaciones divertidas y cómicas, siendo la nota más destacada de la misma, ya que Peter nos deja en muchas ocasiones con momentos muy divertidos, y que acentúan lo que quieren mostrar en Homecoming, que todavía es un novato en esto de salvar al mundo. Y es que el personaje todavía está en el instituto, y durante la cinta nos reflejan cómo va lidiando con su vida como nuevo protector de Nueva York y su vida como adolescente al que le preocupan cosas relativas a sus estudios y demás  problemas propios de un chico de apenas 15 años. Utilizando una frase mítica que se pronunció en la película original de Tobey Maguire años atrás, “un gran poder conlleva una gran responsabilidad”, y el fundamento de la película no es otro que ese, cómo Peter debe actuar y  vivir en base a sus poderes y compaginarlo con su vida normal.

He mencionado a Maguire, y es que las comparaciones van a ser lógicas, dado que ya es el tercer Hombre Araña que vemos en la gran pantalla. Sinceramente, tras lo visto en Homecoming la actuación de Tom Holland me ha dejado muy satisfecho, continuando con su aparición en Civil War, que ya fue de mi agrado. Creo que el enfoque escogido esta vez es el correcto, dado que el de Tobey Maguire era un Peter Parker más adulto, y el tono de las películas era más serio. Con Andrew Garfield se veía a un protagonista más desenfadado, y en muchas ocasiones hasta sobrado. Aquí, la sensación que quieren mostrar es clara: es un crío, nerd, y un poco pringado, que muchas ocasiones se ve superado por las circunstancias y todavía está aprendiendo a manejarlo todo. Creo que las futuras intervenciones de Holland en el universo Marvel serán claves para determinar si éste es el mejor Spiderman cinematográfico, pero para empezar, ya ha entrado con muy buen pie. Eso sí, si no os gustó Tom Holland en Civil War, no creo que os cambie de parecer, porque esta es su película, y por lo tanto, vive de la actuación del joven intérprete.

Si tuviera que criticar algo de la película, o más bien de la promoción de la misma, son los diferentes tráilers que hemos visto a lo largo de los meses para anunciarla. Si los habéis visto, creo que os van a fastidiar muchos momentos importantes del film, porque la mayoría se han ido mostrando en fragmentos en los vídeos promocionales, y cuando los ves, prácticamente sabes cómo se van a resolver, y eso le quita muchas veces el factor sorpresa o la epicidad en ciertos puntos. No obstante, aunque se fue mostrando mucho material de la cinta, está claro que todo no se mostró, y hay lugar para la sorpresa durante los 133 minutos que dura la misma. Pero me queda la duda de que si hubiesen mostrado menos, tal vez me habría gustado más.

Aunque la duración sea superior a 2 horas, lo cierto es que se me pasó volando, porque prácticamente a lo largo de la misma no hay pausas ni momentos de extrema lentitud. Cuando quiere subir una marcha lo hace, y cuando tiene que bajar las revoluciones lo hace bastante bien, sin caer en el tedio ni hacerse pesada. Homecoming tiene mucho ritmo y mucha acción, y algunas escenas bastante espectaculares que merecen la pena verse en una pantalla de cine. En este aspecto, la nueva película de Spiderman ha dejado muy buenas sensaciones y ha cumplido las expectativas generadas. Por cierto, un detalle: Spiderman Homecoming tiene dos escenas post créditos, que os recomiendo que veáis, aunque si sois fans del universo cinematográfico Marvel, ya sabéis que lo lógico es esperar para ver más metraje tras la cinta principal.

Sobre los personajes, al margen de Peter, la acción se centra en el villano de la cinta, interpretado por Michael Keaton (Birdman), que da vida a Vulture, y que cumple bastante bien, poniendo en más de un aprieto al joven Parker. El resto, la verdad es que no da para mucho análisis. Marisa Tomei como la tía May lo cierto es que sólo sirve para el gag de lo atractiva que es, y bueno, Robert Downey Jr. también tiene su cuota de pantalla, algo que entre los pósters y promos se han encargado de contarnos y mostrarnos, por lo que entre ambas cosas tenéis las apariciones de Iron Man en Homecoming. Quizá otro que destacaría es el amigo de Peter, Ned, que como compañero y amigo cumple, además de aportar más momentos divertidos.

En líneas generales, la película propia del Hombre Araña cumple de sobra con las expectativas generadas, y Tom Holland da los primeros pasos para convertirse en un gran Spiderman, sino el mejor, pero el tiempo lo dirá. Como punto flaco, demasiada escena mostrada en promos previas que resta sorpresa a grandes momentos, aunque eso no quita para que sean disfrutables durante el desarrollo de la cinta. Una notable presentación de Spiderman en su regreso a casa.