Crítica: Manchester frente al mar
Este año la carrera de los Oscars está algo descafeinada, es tanto el favoritismo que tiene “La La Land” de cara a la gala que el resto de películas se tiene que conformar con una pelea particular por lograr ser la alternativa al musical de Chazelle en caso de haber una sorpresa. Toca el turno de “Manchester frente al mar”, una de esas películas que están posicionadas como una de las candidatas a ser la sorpresa el próximo día 26 en el Teatro Kodak.
“Manchester frente al mar” nos cuenta la historia de Lee, un fontanero antisocial que tras la muerte de su hermano se ve obligado a volver a su pueblo natal y a enfrentarse a los demonios de su pasado. Durante toda la película vamos siguiendo 2 líneas temporales, los eventos que en el pasado le llevaron a tener la actitud seca que tiene en el presente y los cambios que sufre su vida tras la muerte de su hermano.
Aprovechando lo comentado de “La La Land” en el primer párrafo, si esta es una historia colorida y alegre, “Manchester frente al mar” es todo lo contrario. El film de Lonergan es una película gris y plomiza sobre el duelo tras la pérdida de un ser querido. No esperen salir contentos y llenos de esperanza de la sala, no es esa clase de película.
Durante sus 2 horas de duración lleva bastante bien el ritmo; pese a ser un dramón de proporciones bíblicas en ningún momento llega a ser pesada. Únicamente su final, algo anticlimático y frío para mí, baja el nivel de la película ya que considero que todo el desenlace es algo apresurado; sin embargo no choca el estilo de narración que tiene y se podría decir que está hecho así a posta, con lo que no sabría si considerarlo como un fallo del film.
No puedo decir nada sobre la actuación de Casey Affleck que no sepáis ya. El chico lo borda y puedo decir que para mí, a falta de ver “Fences” y “Captain Fantastic” debería ser el ganador de la estatuilla a mejor actor el día 26, repitiendo el premio conseguido en los Globos de Oro. Lucas Hedges también destaca como sobrino de Lee, pero el peso del personaje y la brillantez de Affleck ensombrece al resto del reparto (incluida Michelle Williams).
“Manchester frente al mar” es una película dura, sólo apta para aquellos que sepan que van a ver un drama sobre la muerte, el duelo y la culpabilidad; sin embargo quienes sean capaces de soportar la dureza emocional del film podrán disfrutar de un drama de los que se recuerdan para toda la vida.