Shameless: Emmy Rossum y la igualdad salarial
Tiene gracia cómo tienen lugar los acontecimientos en la vida de una persona, ya que dos hechos aparentemente inconexos terminan por relacionarse de la forma que menos te lo esperas. Me ha pasado a mí esta semana, ya que la carrera que estudio (Derecho) y una de mis series favoritas (Shameless) han terminado convergiendo en un tema que estoy tratando en una de las asignaturas que estoy cursando este semestre: la igualdad salarial entre hombres y mujeres. La protagonista es Emmy Rossum, y a continuación os explico más.
Lo primero que tenía claro es que no quería usar un titular que pareciese catastrofista o casi apocalíptico, como han realizado algunos medios en Estados Unidos, más que nada porque me gustaría pensar que las cosas terminarán por solucionarse para bien.
Una realidad hoy en día, tanto en nuestro país como en la mayor parte del mundo, es que las mujeres y los hombres no perciben un salario equitativo en condiciones laborales equivalentes. Es decir, una mujer, en la misma posición laboral que un hombre, con más méritos o incluso más experiencia laboral, en demasiadas ocasiones no percibe un salario igual o superior al de su compañero masculino. Tristemente en nuestra sociedad de pleno siglo XXI es una realidad demasiado extendida y a la que debería ponerse freno cuanto antes si queremos sacar pecho de que en el mundo laboral se respetan los derechos de los trabajadores por igual.
Centrando ya el tema que nos concierne, la actriz de Shameless, Emmy Rossum (Fiona Gallagher), ha exigido a la cadena que emite la serie (Showtime) cobrar tanto o más que su compañero de reparto William H. Macy (Frank Gallagher). Según informa The Hollywood Reporter, la actriz habría puesto ese requisito como condición fundamental para renovar su contrato y, en consecuencia, permitir que la cadena renovara la serie por una octava temporada, algo que todavía no ha hecho, según dice el medio estadounidense, mientras deciden si aumentar el sueldo de la actriz o no. Las fuentes del medio afirman que si cierra el trato con la cadena, la productora de la serie negociaría de nuevo con el resto de miembros del reparto, incluidos Jeremy Allen White (Lip Gallagher), Cameron Monaghan (Ian Gallagher) y Steve Howey (Kevin); pero si ella no llega a un acuerdo con la cadena, ésta podría elegir entre renovar la serie pero sin la presencia de Fiona, o incluso cancelarla.
Emmy Rossum no es la primera en exigir un salario equitativo con respecto a su compañero masculino de ficción. Hace unos meses, Robin Wright (Claire Underwood en House of Cards) amenazó con denunciar públicamente la situación si no le daban un salario equivalente al de Kevin Spacey (Frank Underwood), y finalmente acabó por conseguirlo.
En mi opinión, Emmy Rossum merece que le aumenten el sueldo. Primero, porque ya va siendo hora de empezar a respetar los derechos de las mujeres, en cuestiones laborales y no laborales, en general, y qué mejor forma de recompensar la notable actuación de la actriz durante años en la serie. Segunda, porque Fiona para mí, es más protagonista que Frank en la mayor parte de temporadas que lleva emitiéndose la serie. Al personaje de Rossum normalmente le dan mayor cuota de protagonismo en las tramas que a Frank, que muchas veces está de fondo, con tramas absurdas y cargantes que lo único que aportan es el contrapunto cómico de la serie pero poco más. Es más, en numerosas ocasiones, la serie le ha dado tramas en las que su vida estaba amenazada, como si quisieran quitarse de en medio al personaje porque no saben qué más hacer con él. Fiona para mí es clave en la serie, Frank no lo es tanto; no imagino la serie sin ella, pero sin él sí. Tercero, dudo seriamente que la cadena tenga los arrestos de cancelarla, ya que una vez que se ha dado a conocer la noticia, la ventaja la lleva la actriz; si la cancelaran o continuaran la serie tras saberse todo esto, los verdaderos “shameless” serían ellos, por lo que la pelota está en el tejado de Showtime. Además, Shameless ha pasado a ser una de las series más importantes de la cadena en los últimos años, recibiendo nominaciones a diversos premios y siempre muy bien valorada por la crítica y el público, por lo que perderían un pilar fundamental, y no creo que quieran hacerlo y más por motivos como éstos.
Estaremos atentos a las informaciones que se vayan publicando en los próximos días, pero quiero pensar, como decía al comienzo del artículo, que acabará resolviéndose para bien el tema y Emmy reciba la contraprestación que merece por su papel como Fiona Gallagher. Yo comprendo que cuando empezó la serie, la cadena pagara más a Macy debido a su trayectoria cinematográfica (nominado incluso al Oscar), siendo además el principal reclamo para los espectadores que fueran a comenzar la serie, pero los años han pasado y Emmy Rossum y su personaje Fiona le han comido terreno a la importancia de Frank Gallagher en Shameless. La actriz merece el aumento de sueldo, y espero que se lo otorguen.