Parece mentira, pero llevamos ya siete semanas consecutivas con episodios de Arrow. Unas siete semanas en las que a estas alturas, puedo decir sin riesgo a equivocarme, que la serie ha recuperado el nivel perdido en anteriores, y si bien no está a un nivel excelente o sobresaliente, está acumulando una buena cantidad de episodios bastante entretenidos, con tensión e intrigas varias. Todo ello, antes de llegar al episodio 100, que pinta bastante bien. Pero vamos primero con lo que sucede en el capítulo de esta semana, Vigilante.

Monto un circo y me crecen los enanos. Eso debe pensar Oliver en más de una ocasión, y sobre todo tras ver cómo van proliferando en Star City justicieros de dudosa moralidad, como era el propio Arrow cuando comenzó la serie, no nos engañemos. Al principio de la serie, Oliver Queen se regía por una serie de reglas que eran bastante cuestionables. Molaba bastante verlo en acción, pero sin duda sus actitudes eran reprobables, o al menos lo suficientemente serias como para que se replanteara su estrategia de cara a salvar su ciudad. Con el paso de las temporadas, esta evolución es patente en el personaje, ya que ahora, Oliver tiene claro que está en el buen camino, y no duda en oponerse a aquellos que se toman la justicia por su mano, como este nuevo jugador que ha llegado a la ciudad, Vigilante. Por cierto, se nota que al amigo no le ha puesto el mote Cisco, porque lo cierto es que el nombre no podía ser menos original.

Por si fuera poco lidiar con Prometheus, ahora el Team Arrow tiene que detener al tal Vigilante, que se dedica a ir por la ciudad matando a ladrones y gente que debería haber pagado por sus crímenes, pero que el sistema judicial ha dejado en libertad. Mira, algo de lo que podemos sacar pecho los españoles: nuestro sistema no es el único con fallos. En Star City también hay lugar para el error, y eso hace que Oliver se plantee si su dirección es la correcta. Comprendo completamente sus dudas, yo también las tendría. Si he tratado de reformarme, cambiar mi actitud de cara a cómo resolver los conflictos que se me presentan, confío en la policía y el sistema para que les impongan a los malhechores el castigo que se merecen, y en pocos años, por un tecnicismo, un fallo o simplemente por favores realizados entre bastidores, salen de nuevo al mundo, campando a sus anchas y como si no hubiese pasado nada. Te hace plantearte si Vigilante no está en lo cierto al tomar medidas contra ellos, y tú te equivocas llevando a cabo tus acciones. Al margen de estas cuestiones casi filosóficas o propias de debates jurídicos, la presentación de este nuevo villano me ha gustado bastante. Se le ve muy profesional y, dentro de su locura, parece tener las ideas muy claras. Dos preguntas me vienen a la mente: ¿quién es? y ¿cuánto durará?

La primera supone un nuevo misterio y más material para teorizar para todos aquellos que les encante darle vueltas a quién podría ser este nuevo jugador en la ciudad. Por si no tuviéramos bastante con Prometheus y su identidad (luego hablaré de él), ahora hay otro enmascarado que hay que desenmascarar. No es el comienzo de un trabalenguas, es la realidad. Oliver ha estado a punto de hacerlo, pero se ve que los guionistas no quieren arruinar la sorpresa tan pronto. Me parece bien, que mantengan el misterio durante un tiempo. Y sobre la segunda cuestión, cuánto tiempo permanecerá con vida, si atendemos a lo que duró Church, yo diría que no mucho. Si se trata de un personaje que han introducido para complicar al Team Arrow durante unos cuantos episodios, su función terminará probablemente más pronto que tarde. Church inició el caos en la ciudad, para dejar paso a que Prometheus sea el principal foco de atención para Oliver y compañía; Vigilante podría tener un arco argumental de unos cuantos episodios, similar al de Church, para después ser neutralizado y concentrarse en Prometheus en la recta final. Lo que está claro, es que en esta quinta temporada, los guionistas han decidido no darle descanso a Oliver Queen, porque lo cierto es que las cosas van a seguir siendo bastante complicadas para él y los suyos, y más viendo el final del episodio.

He de ser sincero: no me esperaba para nada ese giro al final del capítulo. ¿Evelyn trabajando para Prometheus? Lo cierto es que es un movimiento muy pero que muy interesante por parte de los guionistas, el darle al villano un aliado dentro del Team Arrow para que le dé información desde el corazón del grupo, y supongo que en el futuro, acabará por ser un intento de caballo de Troya, o uno al completo, jugándosela en próximos episodios. Además, le das más importancia y protagonismo a un personaje secundario que has fichado esta temporada, como es Evelyn, y hace que los espectadores presten más atención al mismo. Muy buen giro, y que solo alimenta más y más las ganas que tengo de ver quién es en realidad.

Siguiendo con las apuestas semanales sobre la identidad de Prometheus, yo esta semana descartaría a Quentin. Me parecería muy cruel que le dieran ese giro a un personaje que está roto emocionalmente, y que es más comparsa que otra cosa. Comprendería el querer darle vidilla a su importancia en la serie, pero repito, tal y como se encuentra el padre de Laurel y Sara en estos momentos, me parecería un giro cruel para este hombre. Sigo apostando fuerte por Adrian Chase, que cada escena que tiene deja un gesto, una actitud, unas formas que hacen que mis sospechas crezcan y crezcan. En el interrogatorio a una de los ladrones, la manera de abordar el mismo me ha parecido muy agresiva para un fiscal del distrito. Vale, consigue resultados, pero lo cierto es que me llama mucho la atención, y como sospecho de él desde hace tiempo, no ayuda a que cambie de parecer. He dejado claro semana tras semana que Prometheus podría ser él, que es mi candidato número uno, pero ahora, con la irrupción de Vigilante, tampoco descarto que pueda ser él. Sinceramente, creo que uno de los dos será Adrian Chase, y si tuviera que apostar, pondría mis fichas en la casilla de Prometheus. Pero tampoco descarto que sea el nuevo malo de la ciudad.

Sobre Rusia, misma dinámica: breve pero intenso. Hemos conocido algo más a Konstantin Kovar, que hizo buenas migas con Oliver (nótese la ironía), y le revela que quizá los de Bratva no sean tan buenos amigos como dicen ser, y que le estén utilizando simplemente para llevar a cabo un tira y afloja con él, de cara a sus negocios varios. Me gusta la frase que le dice Kovar a Oliver, que la verdad es simplemente una cuestión de perspectiva, depende de cómo la enfoques, puede resultar que los buenos no son tan buenos, y los malos no son tan malos. A pesar de que me gusta esa frase como he dicho, aquí creo que hay pocas dudas, quizá Bratva no sean las hermanitas de la caridad, pero Kovar no es tampoco un monaguillo precisamente. Oliver no sigue en la organización, por lo tanto, está claro que no terminará en buenos términos con ellos, o al menos me sorprendería que lo hiciera. A todo esto, la nueva amiga del alcalde de Star City, la periodista Susan Williams sigue teniendo la información de que nuestro protagonista estuvo en Rusia hace cinco años. Me pregunto a qué juega, y a qué espera para lanzar la bomba. ¿Quizá se lo esté pensando? ¿O está también ella preparando un movimiento contra Oliver?

Por primera vez en la temporada, llegamos a un parón, propiciado por Acción de Gracias, que será la semana que viene. La siguiente, atención, tenemos doble acontecimiento. En primer lugar, se emitirá el 5×08, que será el episodio 100 de la serie. Por si fuera poco, éste se corresponderá con una de las partes del mega crossover que The CW tiene preparado para la semana del 28 de noviembre, que dará el pistoletazo de salida con Supergirl, siguiendo en The Flash y Arrow, finalizando en Legends of Tomorrow. Una semana muy importante que en Casa Spammer cubriremos al completo, por lo que permaneced atentos, que no sólo yo seré el que os hable de las series de CW esa semana. Ahora, solo nos queda esperar para la última semana de mes, y ver qué depara el crossover y el episodio 100 de Arrow. ¡Un saludo a tod@s!