Crítica: The Big Short

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The Big Short o La Gran Apuesta está nominada a cinco premios Oscar, incluyendo mejor película y director (Adam McKay) . También está nominado Christian Bale como actor de reparto y Adam McKay tiene otra nominación: como guionista y además la película compite a Mejor montaje. Personalmente yo no le daría ninguno, no porque la peli no me haya parecido estupenda, sino porque otras candidatas lo merecen más, porque la verdad es que sí que me ha parecido estupenda.

La Gran Apuesta es una aproximación fresca, divertida, cínica y audaz a esa crisis que ha arruinado a mi generación. Merece la pena verla, es muy recomendable aunque ya sepáis todo sobre las hipotecas subprime y JP Morgan y todos esos malditos diablos que se las apañaron (y apañan) para que casi todos seamos pobres. Si os interesa el tema, posiblemente no vais a aprender nada nuevo, pero os lo vais a pasar bien y si no os preocupó demasiado todo ese rollo de la crisis, vais a aprender mucho sobre ella y de manera muy divertida.

Es una película valiente tanto en el fondo como la forma, el montaje es tan loco como espléndido, la dirección brillante, las interpretaciones fantásticas y las sensaciones general muy positivas. Por lo menos, las mías, así que os recomiendo encarecidamente ir a verla. Y recordad que siempre es mejor la versión original y que tanto Steve Carell, como Ryan Gosling y especialmente Christian Bale lo bordan, así que lo suyo es que los escuchéis a ellos y no a los tipos que los doblan.

A modo de sinopsis libre de spoilers: la peli trata de unos tipos más bien raros, que llevados por el estudio, el tesón o la pura casualidad, son capaces de predecir la crisis que sacudió la economía mundial en 2008. Y actúan en consecuencia a estas predicciones, en un mundo sucio y cruel donde todos van a sacar más y más pasta.

Al ver La Gran Apuesta es inevitable pensar en El lobo de Wall strett, de algún modo las dos películas están muy relacionadas, aunque, para mi gusto son casi opuestas, sobre todo porque El Lobo de Wall Street me resultó molesta, sin embargo La Gran Apuesta me ha parecido placentera. Ambas hablan de ese mundo donde hay unos tipos que juegan al golf y gastan dinero de forma aberrante mientras juegan con los honorarios, las hipotecas, las pensiones e incluso las vidas de las personas corrientes. Pero la peli del 2013 era desagradable a más no poder, después de verla tenías la sensación de que el género humano es despreciable en su casi totalidad y Leo DiCaprio y Jonah Hill más despreciables incluso que los demás. La Gran Apuesta me ha hecho sentirme bien, muy bien, me he divertido muchísimo. Quizás haya salido del cine algo más conspiranoica al respecto de las reservas de agua en el planeta, pero por lo demás he pasado un rato estupendo.

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Dejando de lado los términos banqueros, que personalmente conocía entre poco y nada (quizás porque he visto la peli en versión original), todo el lío de ingeniería financiera se entiende sin problemas, y si en algún momento te despistas, la peli, al igual que un buen profesor, te cuenta un chiste rompiendo la cuarta pantalla y te explica en lenguaje para legos cualquier cosa que nos suene a raro, como por ejemplo esos términos banqueros…

Es una peli con muchísimo humor, aunque yo no la calificaría como comedia en sentido estricto, porque lo que trata es un tema muy serio y lo hace con seriedad. Es un humor negro y cínico, es triste, la película es una crítica al capitalismo brutal y no deja atisbar ni un rayito de esperanza al espectador, que no es otro que el ciudadano que sufrió y sufre la crisis financiera. De manera que estamos jodidos, nos van a seguir jodiendo y hacemos películas para reírnos de ello.

Un pequeñísimo apunte que me gustaría compartir con quienes han visto la película, spoiler, por lo tanto, para quien no la haya visto.

Spoiler alert!

Me parece especialmente desgarrador el momento en el que Mark Baum, está solo, tomándose un café, siendo el hombre rico que es, el hombre que vive en Park Avenue y mientras habla con Vinnie al teléfono le dice algo así: lo sabían, sabían lo que estaban haciendo y no les importó. Seguidamente da el OK a la venta… alucinante.

Y una preguntilla para quienes habéis visto la peli: ¿os obsesionasteis con el ojo de Christian Bale?, yo sí.

Nada más, si la habéis visto, sentíos libres de comentar.