Aprovechando la coyuntura en la que estamos todos inmersos, recuperamos la sección Spammers del Mes, para dejaros nuestra opinión sobre los elegidos a través de las encuestas que realizamos en Twitter entre diferentes candidatos a mejores intérpretes de cada mes. Iván y Daniel nos hablan, respectivamente, de Claire Danes y Bob Odenkirk. Debajo tenéis sus impresiones.

Claire Danes (Homeland)

Que Claire Danes es lo mejor de Homeland creo que es algo que todos podemos dar por hecho a estas alturas, hasta en los momentos más bajos de la serie la actriz ha cumplido haciendo un papelón. Ni es noticia que haya ganado su encuesta, ni lo es que su interpretación de Carrie Mathison esté a un gran nivel.

Se me hace raro escribir sobre sus virtudes encarnando el papel, pero estamos hablando de una ficción que encara su final tras 8 temporadas. No hay nada que pueda decir que no suene forzado, pues que Claire Danes lo haga bien es una constante desde el primer minuto de Homeland.

Lejos queda ya el momento en el que se hizo con el control absoluto de la serie, así como esas temporadas más flojas que a muchos se nos hicieron bola. Cuando Homeland ha estado mal ella ha sido lo único que se podía salvar; y ahora que la serie está bajo mi punto de vista en un buen estado de forma, ella está brillando y quienes la han votado lo han sabido ver.

Bob Odenkirk (Better Call Saul)

Lo cierto es que, cuando iba a preparar estas líneas, estaba convencido de que Bob Odenkirk tuvo su cuota de gloria en las numerosas nominaciones a Breaking Bad durante sus años de emisión, pero lo cierto es que empezó a ser tenido en cuenta para los Emmy y los Globos de Oro cuando AMC le concedió la oportunidad de retomar la interpretación de ese abogado tan peculiar que fue Saul Goodman en la serie de Walter White, solo que esta vez no iba a estar a la sombra de semejante gigante, sino que él iba a ser el principal foco de atención.

Desde 2015 hemos tenido el spin-off de una de las mejores series de la historia de la televisión, puede que la mejor, y las expectativas hacia este producto secundario eran más grandes de lo normal, porque el equipo creativo detrás de la ficción de Walter White iba a seguir al frente de Better Call Saul, y los orígenes del abogado, de entrada, atraían lo suficiente para que los nostálgicos de Breaking Bad le dieran una oportunidad. Con el paso del tiempo, Bob Odenkirk y Jimmy McGill primero, y ya desde hace bien poco Saul Goodman, han labrado su propio camino, y se han ido desmarcando de su predecesora, si bien compartiendo muchas cosas con la serie madre, pero ya implantando un estilo personal que le sienta bastante bien y ha hecho que las temporadas de Better Call Saul, y algunos de sus episodios, se cuelen en las listas de cada año que recogen lo más destacado del mismo. Este año, ya con Jimmy convertido al completo en Saul, estamos viendo las facetas más parecidas del personaje a las que conocimos en su día en Breaking Bad, y creo que esto está siendo lo mejor de la quinta entrega, que ya está Saul Goodman en su serie, como se nos había prometido desde el principio.

A los que no habéis visto ni una ni otra, recomendaros encarecidamente que le deis una oportunidad a Breaking Bad, porque es una joya televisiva que merece ser vista, y que si le cogéis cariño a Saul, optéis por ver Better Call Saul, que aunque no llegará a ser lo que fue (ni lo pretende) la de Walter White y Jesse Pinkman, es entretenida y mitiga la pérdida y el vacío dejado por la grandísima serie madre.