Pilotos: Deadwater Fell
Drama. Inglés. Miniserie de cuatro episodios, con una duración aproximada de cuarenta y cinco minutos. David Tennant (Doctor Who, Jessica Jones, Broadchurch…) y Cush Jumbo (The Good Fight) como protagonistas principales. ¿Qué más queréis? Las bases de Deadwater Fell son, cuanto menos, llamativas, y su trama se nos presentó el pasado fin de semana en Channel 4 con la emisión de su piloto, que paso a analizar.
Cualquier diría que estamos ante una serie dramática cuando empezamos el episodio. Sus primeros diez minutos son como pasear por un arcoíris, y comer golosinas de mil sabores. Todo es idílico y perfecto en la pequeña localidad escocesa (ficticia) de Kirkdarroch, donde sus habitantes disfrutan de su día a día tranquilo y calmado, alejado del mundanal ruido y centrado en vivir sus vidas, cada uno con sus propios problemas, pero que a primera vista no parece que existan. No obstante, esto es un drama, y tenía que empezar a mostrar algún síntoma de ello.
Cuando un incendio devora prácticamente la vivienda de una de las familias más destacadas del pueblo, los Kendall (la familia del personaje de David Tennant, llamado Tom), y se cobra las vidas de la mujer del protagonista y de sus tres hijas, ahí comienza realmente Deadwater Fell. El prólogo feliz que vemos cuando arranca la serie es simplemente una fantasía, para ponernos en situación y que nos sepa mal el drama humano que vive esta población. A priori, puede parecer un mero accidente, pero cuando la investigación oficial empieza a desgranar lo que rodea a la familia, además de algún que otro flashback bastante revelador, los espectadores comenzamos a ver, como podíamos imaginarnos desde un primer momento, que no todo era tan perfecto y idílico como nos habían mostrado. Tengo que decir que hay ciertos detalles que son bastante previsibles, al margen de que, evidentemente, no todo iba a ser de color de rosas con la familia de Tom, y me imagino que con la de Jess (Cush Jumbo) tampoco será así.
Cuatro episodios tan cortos para el clásico formato inglés al que solemos estar acostumbrados (unos sesenta minutos aproximadamente) da pie a que se dejen de tonterías y vayan al grano desde el minuto uno, y esa sensación nos queda tras sucederse el incendio, que no hay tiempo para el luto porque ya nos centramos de lleno en saber las causas del mismo, y en conocer más en profundidad a las familias protagonistas y qué ha llevado a este evento tan desgarrador, y si realmente es un accidente o hay algo más detrás.
Del elenco, al margen de Tennant y Jumbo, destaca Matthew McNulty (Misfits, The Terror) en el papel de Steve, pareja de Jess; y Anna Madeley (Utopia, The Crown) como Kate, la esposa de Tom, que son los otros dos roles importantes en esta historia. Ninguna queja al respecto de la interpretación de todos ellos. Los dos principales son bastante conocidos, y sus roles en otras ficciones hablan por sí solos, al igual que el caso de McNulty y Madeley. Debía ser uno de los puntos fuertes de la serie, y cumplen las expectativas con creces.
Os animo a que le deis una oportunidad a la serie, por su breve extensión, por su elenco, y por su trama, que si bien nos suena de muchas otras ficciones y producciones, puede resultar ser interesante si la saben llevar. Además, los productos audiovisuales que nos llegan desde las islas británicas suelen cumplir en cuanto a calidad se refiere, por lo que siempre es recomendable pegarles un vistazo, porque nunca sabes lo que te puedes encontrar, y si estamos ante uno de los primeros éxitos del año en el Reino Unido.