Review The Flash: Dead Man Running
¿Una review mía de esta temporada de The Flash a tiempo? ¿Qué clase de brujería es esta? En fin, el ínfimo problema que tenía y que hacía que las reviews se marcharan de forma indefinida al fin de semana terminó y con esto llega mi firme intención de que las podáis tener en la web lo antes posible. Después de esta entradilla de información personal que seguramente no le interese a nadie, vayamos a lo realmente importante ¿Qué ha pasado en el episodio?
La semana pasada terminamos con Barry decidiendo que es el momento de que el resto del equipo sepa la verdad sobre la Crisis que se avecina y que se ha convertido uno de los ejes centrales de las temporadas de las series más longevas del Arrowverse. Barry tenía esa intención y con eso arrancamos, con la pareja contándoles la verdad al grupo, pero a medias, ya que omiten el destino que sufrirá Flash para que puedan sobrevivir a lo que está por venir.
Una vez quitada la tirita, el episodio se centra ante todo en mostrar los problemas que tiene Killer Frost en aceptarlo, cosa que me parece coherente ya que como bien dice ella prácticamente acaba de tener una vida cuando le están diciendo que en mes y medio a lo mejor se acaba el mundo. Veo lógico que la serie haya hecho hincapié en su punto de vista; sin embargo, me parece algo artificial que para los demás haya sido un “pues bueno, a otra cosa mariposa”, me parecen muy innecesarias y fuera de lugar las subtramas de Ralph con sus mommy issues y la de Iris y Cisco buscando el Wells anual. Vale, entiendo que ya están más acostumbrados a la cantinela de que se va a acabar el mundo, pero les acaban de decir que un hecho que lleva profetizado desde el propio piloto está a 7 semanas de ocurrir y se lo toman como si nada. No me parece coherente.
Puesto que han desaprovechado descaradamente la mejor baza que tenía el capítulo, ¿en qué se han centrando? En nuestro amigo Mohinder. Recordemos que la aportación del doctor Rosso en el episodio anterior fue simplemente matar a un traficante de materia oscura y ser golpeado por su versión zombi al final; pues bien, ahora hay que buscar a ese zombi ya que está dedicándose a robar materia oscura de todos los sitios que puede metiéndolo de lleno tanto a él como al científico dentro del radar del Team Flash.
Voy a ser tajante ya en el episodio 3 y puede que lo diga por puro despecho solamente por tener unas ganas locas de que llegue la Crisis, pero todo lo del doctor este tiene pinta de poder ser la peor trama global que ha tenido The Flash hasta la fecha; me produce 0 interés su investigación o que pueda controlar a quienes infecta. Esta semana ha sido todo una excusa para que meterlo con calzador en la dinámica de la serie y aunque acepto que al menos Rosso es un villano es distinto a lo habitual, no paro de recordar cómo quemaron a DeVoe (con quien tiene bastantes similitudes) con un arco de 22 episodios cuando se veía a la legua que no era un antagonista pensado para la estructura que suele tener The Flash; me temo que puede pasar algo similar este año, ya que me parece que puede terminar resultando cansina la presencia de este personaje y sus historias cuando el foco está puesto en otro lado.
Aunque su presencia haya sido bastante anecdótica, hay que hablar un poco del nuevo Wells que nos han presentado para esta temporada, quien a simple vista parece ser una suerte de Indiana Jones solitaria que ha venido a Tierra-1 buscando Eternio … cosa que supongo que más adelante la serie revelará qué diantres es.
Así que con Barry confesando al Team Flash su verdadero destino, Rosso haciendo cosas de científico loco y el nuevo Wells encontrando la ubicación de aquello que anda buscando, termina una semana más The Flash mientras van quedando menos semanas en el calendario para que llegue el esperado crossover.