Review Game of Thrones: The Spoils Of War
Estoy totalmente extasiada, creo que acabo de ver uno de los mejores episodios de Game of Thrones y sin duda, una de las mejores batallas, quizás me pueda la emoción del momento, pero sea como sea, ver a los dragones en acción en Westeros y contra personajes conocidos e importantes, es algo que nunca habíamos visto. Y ha sido genial.
Hablemos un momento de las batallas que la HBO nos ha regalado a través de Game of Thrones. Creo que todos estaréis conmigo en que el podio está ocupado por The Battle of the Bastards (6×09), Blackwater (2×09) y Hardhome (5×08). Tres episodios sensacionales y determinantes en el curso de la serie. Cada uno de ellos ofrece una perspectiva única y unas imágenes impresionantes, tales como Jon enterrado entre cuerpos en la batalla de los bastardos; ese temible fuego verde acabando con las esperanzas de Stannis, y la vida el hijo de Davos, en Blackwater o ese momento en Hardhome donde vimos a numerosos salvajes y miembros de la guardia de la noche morir a manos de los muertos, momentos antes de que el Rey de la Noche alzase los brazos triunfante. Los tres han sido episodios épicos, visualmente poderosos y ejecutados con precisión y maestría. Y ahora se une un cuarto competidor para entrar en el podio. Me encantaría leer algún comentario vuestro bajo estas lineas al respecto del top 3, si metéis a los Dothraki, comentad a quien dejáis fuera.
El episodio ha sido escrito por los creadores de la serie, David Benioff y D.B. Weiss, mientras que la dirección ha estado a cargo de Matt Shakman, un tipo con algunos episodios no especialmente brillantes en The Good Wife, Mad Men y Fargo, entre otras series de menor proyección. Pero en Game of Thrones ha estado pletórico, así que estoy expectante por ver qué hará la semana que viene, con un episodio que vuelve a estar a su cargo.
Desde que la horda Dothraki se asomó por el horizonte, mi corazón se puso a mil por hora y me quedé al borde del sofá hasta que aparecieron los créditos. Ha sido impresionante ver a Daenerys desatando el horror entre los Lannister y Tarly, hasta el punto que hasta el loco de su padre hubiera sentido orgullo ante el cuadro de esos hombres ardiendo dentro de sus armaduras.
Quiero resaltar que estamos ante una batalla a la luz del día, donde nada se esconde en la oscuridad, si algunas escenas no son claras a los ojos es por culpa del fuego y el humo. Si la serie nos ha acostumbrado a potenciar las luchas en tonos grises, esta vez ha sido una batalla en tonos tierra. Porque la gama de colores de Más Allá del Mar Angosto nunca ha sido gris, los dothraki han llegado a Westeros y su superioridad es tal, que por un momento hemos teñido Westeros con los colores de las vastas llanuras de Essos.
Ha sido precioso, inquietante y aterrador ver el desconcierto de Bronn y Jaime, ambos en sus caballos sin saber muy bien qué hacer o hacía donde mirar. Ni Bronn ni Jaime son exactamente villanos, de hecho, el episodio nos muestra a ambos charlando con la idea de resaltar su humanidad e incluso simpatía momentos antes de la batalla. Pero están en el bando equivocado y creo que Jaime, tras cargarse a Lady Olenna y obligar a los Tarly a traicionar a los Tyrell, merecía ver de cerca la cara de la derrota. Además, ha luchado bien, con valentía y si hubiera muerto lo hubiera hecho como un héroe. Creo que sólo Jaime y Bronn han estado en verdadero peligro, porque desde mi punto de vista hubiera sido absurdo a efectos de la historia cargarse un dragón tan pronto y Dany, obviamente, no puede morir porque la serie perdería una de sus pilares principales. Llevo mucho tiempo fantaseando con quienes van a estar sobre cada uno de los tres dragones en la batalla final y si pasan a ser dos me rompen los esquemas, así que no he temido mucho por ellos, pero sí que he pasado algo de miedo por la suerte del Lannister y el mercenario.
Me gusta mucho Bronn, y creo que no ha actuado exactamente como un mercenario cuando después del más que simbólico momento en el que se le cae la bolsa del oro, sale corriendo, desesperado, sin caballo, con el terror reflejado en sus gestos y su rostro hacia el artilugio de Qyburn. Luchando, esta vez no por dinero, sino por su vida. Me gusta que tenga buena puntería y que haya herido a un dragón y está bien que haya salvado a Jaime, pero me gustaría más que continuase siendo el tipo egoísta y leal tan sólo al dinero que conocimos hace siete años.
Jaime está vivo, está claro, pero creo que hubiera sido magnífico que Jaime muriera. Hubiese sido un final tremendamente poético. Recordad que Jaime mató a un rey por la espalda, a un rey que disfrutaba quemando gente dentro de sus armaduras … al igual que hoy hace su hija. Recordad que lo mató para que no quemase al resto de la ciudad. Es decir, Jaime, apodado el Matarreyes, traicionó a un hombre con sangre de dragón para salvar al pueblo de las llamas. Y creo que hubiera sido una broma del destino, tan macabra como brillante, que ese Matarreyes muriera a causa de las llamas, por culpa de un dragón de verdad y ante los ojos de la hija del rey que mató. Pero tuvo que aparecer Bronn para salvarlo ….
Para los que tengáis alguna duda o no me creáis si os digo que Jaime está vivo: si Jaime fuera a morir, hubiese muerto carbonizado ante nuestros ojos, Game of Thrones no desperdiciaría la muerte de un personaje como él fuera de la pantalla. Me apuesto una bolsa de oro a que Bronn también está vivo. Lo que queda discernir es si les han dado por muertos o si los tomaran prisioneros, si ocurre lo segundo, puede ser maravilloso verlos reencontrarse con Tyrion.
Es interesante que en esta batalla se haya aludido de alguna manera a los diferentes puntos de vista, que son el eje sobre el cual gira la narración de la novela. Hemos visto una victoria desde las alturas, a la mirada de Dany y Drogon el enemigo estaba siendo eliminado de forma limpia y eficaz. Desde el suelo, a los ojos de Bronn, hemos visto el miedo y la desesperación de los hombres corrientes ante un enemigo que está haciendo añicos a su ejército. A caballo, el terrible dolor de los hombres agonizando mientras arde su carne, una estampa horrorosa la que veía Jaime dirigiera a donde dirigiera sus ojos. También desde las alturas, y por lo tanto en el mismo bando que Daenerys, pero con los pies en el suelo, Tyrion miraba atónito y aterrado la devastación total de hombres a los que antaño consideró los suyos.
Dany, quizás no está totalmente equivocada cuando dice que Tyrion no quiere hacer daño a su familia, el enano realmente está asustado cuando ve a Jaime dirigirse hacia Drogon, pero Cersei lo mataría si tuviera oportunidad y además, Tyrion sabe que el pueblo (o lo que quede de él) estaría más tranquilo con un reinado Targaryen que con la loca mezquina de su hermana.
Por supuesto no hacía falta llevar a los dragones, los dothraki empiezan a matar desde la cuna, matan prácticamente por entretenimiento y lo hacen todos los días, así que para ellos es pan comido deshacerse de estos soldaditos, desprevenidos y cansados después de tomar Altojardín. Supongo que la decisión de llevar a los dragones responde más a una estrategia de imagen, que a táctica militar. Pensad lo que van a contar los supervivientes, pensad en el efecto desmoralizador de ver a un monstruo teóricamente extinto escupiendo fuego sobre los hombres. Los supervivientes que hayan visto a la khalessi no pueden estar más impresionados, e impresionar a los enemigos atizándoles con pesadillas para lo que les queda de vida, es una técnica magnífica.
Creo que el bando de Daenerys tiene claro que no destruirá ciudades ni hará arder al pueblo, supongo que carbonizar a los soldados no entra dentro de la categoría de prender fuego al pueblo, pues aunque sean personas, no son civiles. Y Daenerys ha demostrado ser compasiva, pero también implacable. Ahora bien, calcinar los carros donde se transportaba la comida para el pueblo … quizás eso sí que pueda terminar repercutiendo negativamente en las vidas del pueblo llano y por extensión, en la imagen que tienen de Daenerys.
Sus dragones deben ser instrumentos del cambio, de la obtención de lo imposible, debe continuar construyendo el aura mítica de salvadora que la rodea y por eso no puede plantarse en Desembarco y arrasarlo todo y quizás tampoco debería matar de hambre al pueblo al que quiere gobernar.
Al norte, Sansa se ha convertido en la única Stark normal. Cada miembro de su familia que regresa a casa lo hace más tocado que el anterior, si Bran (que ya no es Bran) se ha convertido en una especie de estatua parlante exenta de sentimientos, Arya vuelve a casa como una experta espadachina con una lista de asesinatos por cometer. Los hijos de Catelyn que quedan vivos se reúnen fisicamente en Invernalia, pero sus mentes están muy lejos de casa y ya no son quienes eran y no sabemos si lo volverán a ser.
Petyr comparte una escena con Bran y le hace un regalo, no sé por qué le regala la daga a Bran, pero todo lo que hace Petyr lo hace por alguna razón, así que la daga que ahora posee Arya significa para Petyr más de lo que parece. Además, si Petyr prevee en su mente todos los futuros posibles, Bran literalmente conoce todos los futuros posibles, por lo que le habrá dado la daga a su hermana por alguna razón. Os explico la importancia pasada del arma, para que podáis analizar la importancia futura. La daga es aquella con la que intentaron asesinar a Bran en la primera temporada, la daga es la prueba que usó Catelyn para culpar a Tyrion por el intento de asesinato de su hijo y lo hizo así porque Lord Baelish le indicó que el dueño de la daga era el Lannister. Sabemos que Tyrion no era culpable, pero Meñique probablemente sí. Toda esta locura contribuyó de forma crucial al inicio de la serie de desagradables y fatales desgracias que asolaron a la Casa Stark. Si la daga era de Petyr, como parece ser, y existe en alguna parte algún elemento que pruebe que fue él quien ordenó matar a Bran, supongo que Arya sumaría un nombre a su lista …. y ya tiene el arma.
Por cierto, la frase con la que Bran corta la conversación con Petyr, ese “Chaos is a ladder” es una alusión directa a un diálogo del sexto episodio de la tercera temporada (The Climb). Varys y Petyr conversan sobre lo incierto de los tiempos que atraviesan, las guerras y las revueltas que están socavando la paz de los Siete Reinos. Varys cree que un poder político estable es necesario para el pueblo y que sin un reino sólido se hundirían en un foso de desesperación, y Petyr le replica con uno de los textos más interesantes que le han dado en la serie: “Chaos isn’t a pit. Chaos is a ladder. Many who try to climb it fail and never get to try again. The fall breaks them. And some, are given a chance to climb. They refuse, they cling to the realm or the gods or love. Illusions. Only the ladder is real. The climb is all there is.”
Gracias a las lamentables dotes interpretativas de Kit Harington necesitamos que Liam Cunningham (Davos) nos explique con palabras que existe cierta chispa Jon y Daenerys, si los actores fueran menos limitados, no hubiesen sido necesarias las palabras de Davos, que me han resultado de lo más cutre … pero tenemos lo que tenemos.
Os recuerdo que Jon es el sobrino de Daenerys, pero él no lo sabe aún y os recuerdo también que los Targaryen son proclives al incesto y defensores declarados de esa práctica. Recordad que Bran tuvo una visión en la temporada pasada, donde vio con claridad que los padres de Jon son Rhaegar Targaryen y Lyanna Stark. El Hielo y el Fuego, los dos principales candidatos a ser Azor Ahai (príncipe de leyenda que según Melisandre y otros creyentes vencerá a los white walkers) están destinados el uno al otro, y si fueran mejores actores, incluso disfrutaríamos el cortejo. En la cueva de las pinturas prehistóricas, aparentemente se hacen ojitos, pero lo importante es que ven como en la antigüedad se fraguó una alianza inusual contra el enemigo del norte y eso anima a Daenerys a convencerse de una vez de que tiene problemas más graves que Cersei. Aunque ella sigue empeñada en que él se arrodille, están dando pasos agigantados hacia la alianza en el norte.
Y para terminar, hablemos del otro gran reencuentro del episodio. Os recuerdo que Theon era un gran amigo para Robb Stark, era algo así como su hombre de confianza. Le traicionó cuando lo enviaron a las Islas del Hierro a conseguir una alianza, después terminó siendo golpeado por una absurda obsesión de agradar a su familia y conquistó Invernalia, hizo creer que había asesinado a los hermanos pequeños y se le fue todo de las manos cuando Ramsay Bolton acabó con él y lo convirtió en Reek. Esta traición de Theon es una de las razones por las que los Stark perdieron el poder que tanto les ha costado recuperar. Después Theon se ha intentado redimir ayudando a Sansa y por eso Jon le dice “What you did for her is the only reason I’m not killing you” … eso y que Daenerys igual lo echa y se queda sin vidriagón y sin aliada contra el ejército de los muertos.
Estamos viendo tantos reencuentros y tantísimo contenido en cada episodio, que casi no nos da tiempo a asimilarlo todo. Me está encantado el ritmo de esta temporada y ardo (como los Lannister), ardo de ganas de ver lo que nos espera en los tres episodios que quedan para terminar la penúltima temporada.
La batalla ha conseguido que el capítulo pase al Olimpo de la serie, porque hasta ese momento me estaba pareciendo el peor de esta temporada. Pero ante semejante despliegue solo cabe quitarse el sombrero.
Me queda la duda de saber como han hecho Daenerys y los suyos para llegar tan rápido a Altojardín.
Tu descripción de lo que ocurre entre Kit y Emilia es perfecta. Son muy malos (ella un poco menos) y nos privan de posibles buenas escenas.
Respecto al debate de las mejores batallas, esta para mí debe entrar en el TOP 3. Si tengo que sacar una es Casa Austera. La quito con dolor, pero La Batalla de los Bastardos y la de Aguasnegras son increíbles.